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El premio Max al mejor actor teatral alude al PP como "enemigo del pueblo"

 

 
LD (Efe) La gala de los premios Max de Teatro también sirvió de acto de repudio contra la oposición al Gobierno. Un día después de lo sucedido en los Goya, Francesc Orella, premio Max al Mejor Actor por Un enemigo del pueblo, previno contra "los enemigos del pueblo" que concurren a las próximas elecciones y recordó que "nuestra obligación como ciudadanos es evitar que se cuelguen del Gobierno de nuestro país el próximo 9 de marzo".
 
La cultura y la música andaluzas, el flamenco, las saetas y alusiones a la Semana Santa marcaron la gala de entrega de los premios de la XI edición de los Premios Max, celebrada este lunes en el sevillano teatro Lope de Vega y conducida por los actores María Galiana y Carlos Álvarez-Novoa.

Con la asistencia del ministro de Cultura, César Antonio Molina, que entregó el Premio de Honor a toda su trayectoria artística como bailarín, director y coreógrafo a Víctor Ullate, el presidente del Consejo de Administración de la Sociedad General de Autores de España (SGAE), Eduardo –Teddy– Bautista, pronunció el primer discurso de la noche para defender los derechos de la propiedad intelectual.

"Celebramos aquí una verdadera república de las artes escénicas, porque de cada espacio llegan con sus lenguas y sus costumbres; el mundo de la cultura sufre estos días un ataque desmedido e inusual, y reivindicamos enérgicamente, estamos aquí para defender los derechos de autor y para defender la propiedad intelectual", dijo Bautista al inicio de la gala y tras una actuación de la cantaora Esperanza Fernández.

El dramaturgo Juan Mayorga obtuvo dos premios, el de Mejor Autor Teatral en Castellano, por El chico de la última fila y el de Mejor Adaptación de Obra Teatral, por la de Un enemigo del pueblo, de Henrik Ibsen, al igual que Elisa Sanz, que obtuvo el premio a la Mejor Escenografía, por Pequeños paraísos y el de Mejor Figurinista, por la misma obra.

El actor Alberto San Juan, que una noche antes había recibido el Goya al mejor actor de cine del año y pidió al recogerlo "que disuelvan esa cosa llamada Conferencia Episcopal", quedó en la gala de los Max sólo como nominado al Mejor Actor Protagonista.
 
El premio al mejor actor fue para Francesc Orella, por su interpretación del doctor Stockman en Un enemigo del pueblo. Al recoger el Max, Orella lanzó su proclama sobre las próximas elecciones generales, alertando que "existen los enemigos del pueblo, aunque algunos no lo sepan". También dijo que "nuestra obligación como ciudadanos es evitar que se cuelguen del Gobierno de nuestro país el próximo 9 de marzo", en clara alusión al PP.
 
Vicky Peña fue galardonada como Mejor Actriz por su trabajo en En Casa, en Kabul.
 
La intérprete destacó que "vale la pena ofrecer desde el teatro público una obra así" y dedicó el premio a Mario Gas y a "todas las personas que cada día desde la lejanía o la cercanía luchan para que su opción sexual, religiosa o moral sea la suya y no la que le impongan desde ningún integrismo".

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