L D (Agencias) Los Reyes presidieron este sábado en el Congreso los actos del XXX aniversario de la Constitución. Antes, en la plaza de Colón, se procedió al izado solemne de la bandera que contó con la presencia de José Bono y Javier Rojo pero no de Carme Chacón.
A la celebración en la Cámara baja faltaron casi todos los presidentes autonómicos -sólo asistieron cinco-. En cuanto a los partidos, sólo acudieron los dirigentes de cinco formaciones políticas: PSOE, PP, IU, CC y CiU. El resto excusó su asistencia por su desacuerdo con la Carta magna o por problemas de agenda.
En las conversaciones de los pasillos y también en las intervenciones ante las cámaras, lo más comentado en este treinta aniversario era si se creía conveniente abordar una reforma o no. Mientras muchas voces abogaban por los cambios, el presidente del Gobierno dijo a su llegada a la cámara que no lo veía necesario. A preguntas de los periodistas, dejó claro que no propondrá "ninguna iniciativa" para la reforma en esta legislatura si no hay "un clima de acuerdo".
Ahora, no
"Todo es perfectible, pero la Constitución tal como está ahora es útil y por tanto no es imprescindible una reforma, podríamos mejorarla, pero no es imprescindible, se puede funcionar con la Constitución para que el país progrese y para que la convivencia se fortalezca", declaró José Luis Rodríguez Zapatero.
"La Constitución ha sido, es y será útil", manifestó. Así, aunque el Gobierno intentó en la pasada legislatura una reforma limitada, que abarcaría aspectos como el Senado, la Corona, la fallida Constitución Europea y los nombres de las autonomías, el jefe del Ejecutivo afirmó que esto no es ahora "una tarea prioritaria".
"La reforma necesita un clima de acuerdo, desde luego si no hay un clima de acuerdo no vamos a proponer ninguna iniciativa, no es en este momento una tarea prioritaria", aseveró preguntado sobre si retomaría su plan de reforma en esta legislatura.
El presidente del Gobierno hizo hincapié en que los 30 años de vigencia de la Constitución "han sido probablemente los 30 años mejores de la historia de España", años "de libertad, de democracia, de progreso económico y social y de proyección de España en el mundo".
Por ello, destacó que la tarea que hay ahora por delante es que los próximos años "sean aún mejores" en avances sociales, en especial en igualdad, "entre hombres y mujeres de manera singular" y para que la educación "alcance las cotas que España merece". España, dijo, debe seguir "transmitiendo admiración en el mundo" igual que los pasados 30 años.
"Es la tarea que hoy tenemos, que los 30 años que vienen de vigencia de esta Constitución tan positiva sean mejores que los 30 años que hemos tenido", resumió el jefe del Ejecutivo, que este mismo sábado en una entrevista en El País descartaba también blindar las competencias y que las reformas autonómicas hayan supuesto, de hecho, una reforma constitucional encubierta.
Rajoy: "Alguna habrá que hacer"
Por otro lado, el presidente del PP, Mariano Rajoy, aseguró que la Constitución, "sin perjuicio" de que reciba alguna reforma, "pues alguna habrá que hacer", consagra la nación española, la libertad del individuo, los derechos humanos y la igualdad de los españoles. En declaraciones a los periodistas nada más llegar al Congreso, subrayó la "vigencia" del texto, que tiene "muchos aspectos positivos".
Uno fue "el acuerdo entre españoles", pues dieron su "apoyo mayoritario" a la Constitución "personas del régimen anterior, personas con posiciones políticas diferentes", y todo ello con un "doble objetivo". El primer objetivo consistió en "mirar al futuro y superar una etapa muy dura de la historia de España" y el segundo, en "fijar unas reglas de juego que constituyesen un marco de convivencia" para que dentro de él todas las posiciones políticas pudieran defender sus planteamientos.
Sin embargo, de entre todos los aspectos positivos, Rajoy ensalzó la reafirmación de la nación española, de la libertad del individuo "por encima de cualquier consideración", de los derechos humanos y de la igualdad, "entendida no como uniformidad, sino como igualdad de oportunidades, derechos y deberes".
"Estos son los grandes avances de una Constitución con la cual hemos vivido 30 años, y sin perjuicio de alguna reforma, que alguna habrá que hacer, espero que vivamos con ella muchos años más", ha sentenciado.