LD (Pablo Montesinos) Los planes de José Luis Rodríguez Zapatero se han visto truncados. El jefe del Ejecutivo pretendía anunciar la remodelación de su equipo de Gobierno el martes, tras su regreso de Estambul, y hacer efectivos los nombramientos en el Consejo de Ministros que se celebrará el miércoles. Sin embargo, las filtraciones le han jugado una mala pasada.
Así lo aseguran fuentes cercanas al presidente, que estaría "indignado" ante los fundados rumores que, según El Mundo, se atribuyen a algún miembro de la vieja guardia del PSOE. "La noticia trascendió, seguramente, en el momento más inoportuno", reconocen en La Moncloa, donde se han visto incapaces de controlar la situación. La foto entre Zapatero y el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, es ya una anécdota para las tertulias políticas.
Según ha podido saber Libertad Digital, el presidente supo de las filtraciones mientras volaba a Estambul desde Praga. En la ciudad turca le esperaban cinco de sus ministros, los titulares de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos; Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba; Defensa, Carme Chacón; Industria, Miguel Sebastián; y Fomento, Magdalena Álvarez. Ésta última, fuera del Ejecutivo según todas las informaciones, no dudó en bromear sobre el asunto: "me echan cada cinco días".
Así las cosas, el presidente ha adelantado su regreso de Estambul y vuela hacia España este lunes por la noche tras la recepción por el Foro de la Alianza de Civilizaciones y la cena. Aunque el presidente turco, Recep Tayip Erdogan, le había invitado a asistir este martes con él a un acto universitario, Zapatero ha declinado finalmente esa invitación tras dar las explicaciones oportunas a su homólogo turco.
Este lunes, el presidente del Gobierno no ha hecho ningún comentario sobre los incesantes rumores políticos y periodísticos sobre el cambio de Gobierno. El silencio respecto a posibles cambios en el gabinete ha sido también la tónica dominante entre los miembros del Gobierno y los dirigentes del PSOE. La secretaria de Organización socialista, Leire Pajín, ha suspendido la rueda de prensa prevista tras la reunión de la Ejecutiva del partido y, entre los ministros, sólo la titular de Educación, Mercedes Cabrera, ha hecho declaraciones; eso sí, para aclarar que las noticias "saldrán" cuando el presidente del Gobierno "las diga".
Profunda remodelación
En cuanto a los inminentes cambios en el Gobierno, hay cierta unanimidad en los medios. Previsiblemente saldrá el actual vicepresidente económico, Pedro Solbes. Un cargo que ocupará Elena Salgado, actual titular de Administraciones Públicas. Salgado tendría la confianza tanto de Rodríguez Zapatero como del ex presidente Felipe González.
Las otras novedades que se barajan son la incorporación de Manuel Chaves como vicepresidente para Asuntos Autonómicos y la de José Blanco para Fomento. En total, Zapatero contaría con tres vicepresidentes ya que María Teresa Fernández de la Vega, que muchos daban por amortizada, seguiría en su puesto y con las competencias de su actual organigrama.
El regreso de Manuel Chaves a la política nacional provocaría el ascenso de José Antonio Griñán, que tomaría el mando de la Junta de Andalucía. El actual vicepresidente del Ejecutivo andaluz fue dos veces ministro con el Gobierno de Felipe González. Primero de Sanidad y Consumo y luego de Trabajo y Seguridad Social.
¿Reducción ministerial?
La remodelación, según algunas fuentes, podría ser aún más amplia, ya que el objetivo con el que trabaja Zapatero es el de reducir el número de departamentos ministeriales y hacer un gobierno más político y menos técnico para afrontar el desgaste que el Ejecutivo está sufriendo por la recesión económica.
Según La Razón, el jefe del Ejecutivo habría pensado en prescindir de César Antonio Molina, Bernat Soria y Mercedes Cabrera, tres de los ministros menos lucidos de su gabinete. Sin embargo, el rotativo aclara que algunos de sus asesores le habrían recomendado sosiego y esperar a las elecciones europeas.
José Luis Rodríguez Zapatero no tiene previsto en principio ningún acto público en su agenda para este martes y fuentes de su entorno han comentado que se dedicará a trabajar en su despacho. En general, la agenda de los ministros también está bastante descargada este martes, siendo la comparecencia en el Congreso de la ministra de Defensa, Carme Chacón, para informar de la retirada de las tropas de Kosovo la cita más destacada de la jornada.
Si finalmente se confirmara la remodelación ministerial y Zapatero quisiera anunciarla este martes, debería trasladarse al Palacio de la Zarzuela para comunicársela oficialmente al Rey. De forma previa, habría tenido que cerrar las conversaciones con los ministros entrantes y salientes, si es que ese trámite no lo ha dado ya por finiquitado.
Una comparecencia del propio Zapatero ante los periodistas oficializaría los cambios antes de que el miércoles los nuevos ministros y los que cambien de cartera prometieran sus cargos en Zarzuela. De forma inmediata, asistirían a la reunión del Consejo de ministros fijada por Zapatero para ese día, una circunstancia inusual ya que desde 1991 no se ha convocado una reunión del gabinete ministerial el miércoles de Semana Santa.