El Comité de Derechos y Garantías del PP ha decidido suspender cautelarmente de militancia a Manuel Cobo por sus insultos a Esperanza Aguirre en el diario El País. Génova ya ha designado un instructor para el caso. La decisión, no obstante, es temporal a la espera de la tramitación del expediente por lo que esta sanción no es ni mucho menos definitiva.
Ahora, al órgano disciplinario le toca dilucidar sobre la gravedad de las palabras del vicealcalde de Madrid. En el peor de los casos para Cobo, el Comité podría considerar que cometió una "falta grave" -que conlleva, según los estatutos, suspensión de militancia por un periodo de tiempo entre uno y cuatro años e inhabilitación para desempeñar cargos en el seno del partido o en representación de éste por igual periodo de tiempo- o "muy grave" - suspensión de militancia por un periodo de tiempo entre cuatro y seis años, inhabilitación para desempeñar cargos en el seno del partido o en representación de éste por igual periodo de tiempo o expulsión del partido-.
Sin embargo, también podría ocurrir que el expediente concluya que no cabe castigo a Cobo, o que éste sea una mera amonestación.
Independientemente de cómo termine el caso, la dirección nacional era consciente de que tenían que actuar "lo antes posible" contra Cobo después de que Génova fulminara la semana pasada a Ricardo Costa. Así lo entienden fuentes de la propia cúpula popular a Libertad Digital, que advierten que la decisión fue tomada "incluso antes" de que el propio afectado diera su versión de los hechos.
En cuanto a si va a continuar o no ejerciendo sus responsabilidades públicas, Alberto Ruiz Gallardón ya ha anunciado que no piensa apartar a Manuel Cobo de la vicealcaldía de la capital. El reglamento, según fuentes consultadas, no dice nada en contra aunque hay quienes creen que por "razones éticas" tendría que dejar temporalmente sus cargos. También seguirá, a priori, de portavoz del PP pese a no pertencer temporalmente al grupo, algo que no podría producirse en el PP nacional porque así lo prohíbe el reglamento.
Esta situación contrasta con lo que le sucedió a Ricardo Costa, a quien sí se le retiró su cargo como secretario general del PP y portavoz en las Cortes valencianas.
Cobo: "Voy a parecer que estoy nervioso"
Esta decisión del órgano disciplinario del partido se produce después de otra jornada de locos en la sede del PP. A las 11:50 horas hizo su entrada Manuel Cobo para declarar ante el presidente del Comité, Alfonso Fernández Mañueco, y su secretario, Carlos Argos. Lo hacía sólo, a pie y aparentemente tranquilo. "Voy a parecer que estoy nervioso y los que están nerviosos son ustedes", acertó a decir ante la decena de periodistas que le abordaron.
Poco más dijo a la salida de la reunión, cuando hizo una brevísima declaración en la que no admitió preguntas: "El comité está haciendo su trabajo y yo he cumplido con mi obligación de venir cuando me han citado y dar todas las explicaciones que me han pedido". Ya tras conocer la noticia de su suspensión, el número dos de Gallardón se limitó a decir que la acepta y acata.
Cifuentes pide que se consideren "falta grave"
Por su parte, la presidenta del Comité de Derechos y Garantías de Madrid, Cristina Cifuentes, convocaba a los medios de comunicación a las puertas de Génova sólo instantes después de la entrada de Cobo para exigir al órgano equivalente a la dirección nacional del partido que considere como falta "grave o muy grave" las declaraciones del vicealcalde.
En ese sentido, aseguró que esa es la postura "unánime" del órgano que ella preside respecto a las declaraciones de Cobo, que considera "injuriosas" y "calumniosas".