(Libertad Digital) El diputado del PP Rafael Hernando debía interpelar este miércoles a Alfredo Pérez Rubalcaba sobre los cupos de inmigrantes. En su pregunta, le exigió que le dijera de dónde partió la orden para detener un número determinado de inmigrantes en comisarías de Madrid y como ahora se ha sabido, también en Castilla-La Mancha.
Hernando también mencionó la Operación Cacería y censuró la actuación de Rubalcaba, a quien calificó como el "ministro de la propaganda y la ocultación" y le recordó que su obligación es luchar contra la delincuencia, no organizar "cacerías" contra ilegales o "contra el PP".
A falta de mejores argumentos, el ministro no dudó en recurrir a un episodio vivido el pasado 21 de julio de 2005, también entre el Congreso de los Diputados, que tuvo a los mismos protagonistas, el diputado popular Rafael Hernando y Rubalcaba. "Me gusta su talante moderado", comenzó diciendo el ministro, para atacar después al diputado: "Dado lo que intentó hacer conmigo la anterior legislatura, que es pegarme, lo de hoy me parece dulce".
La mención del ministro suscitó sorpresa y originó fuertes protestas entre los populares. "No tienes vergüenza", le espetó uno de ellos, lo que llevó a la vicepresidenta de la Cámara, Teresa Cunillera, a amonestarle, una acción que después trató de justificar después en los pasillos. La indignación en la bancada popular se debía a que Rubalcaba había intentado defenderse mencionando un enfrentamiento de hace ya cuatro años que se produjo en un contexto muy distinto: la gestión del Gobierno durante el incendio de Guadalajara, que ocasionó once víctimas mortales.
El día 21 de julio de 2005, la tragedia de Guadalajara llegó al Congreso. Durante una reunión de la Diputación Permanente, Rubalcaba tachó a Hernando de caradura, llevándose la mano a la cara, y acusó al diputado de estar "fingiendo su dolor". Rafael Hernando, que había acudido ese mismo día al funeral de Luis Solano Montesinos, fallecido en el incendio y amigo personal, se enfrentó, indignado, con el ministro a la salida de la reunión. Ángel Acebes y Eduardo Zaplana acudieron a calmar al diputado y acusaron al portavoz socialista de intentar en todo momento provocar un incidente. El ministro, como ahora, acusó al diputado de haber intentado pegarle y de acudir a él con una actitud "agresiva".
Este miércoles, Hernando, tras la mención del incidente por parte de Rubalcaba para defenderse de sus críticas, solicitó a la Cámara poder replicar al ministro. Recordó que él nunca quiso pegar a Rubalcaba ante la acusación que acababa de hacer el titular de Interior y le exigió una rectificación. El ministro se negó limitándose a decir que el incidente está "en las hemerotecas".