(Libertad Digital) El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha anunciado que el coche Peugeot blanco, utilizado en el atentado de Pamplona, fue robado anoche en la provincia de Guipúzcoa, concretamente en Zumaya, y que su dueño lo denunció ante la Ertzaintza en la comisaría de Zarauz.
Rubalcaba no quiso aventurar la cantidad de explosivo que podría llevar el coche bomba y explicó que el comunicante que llamó en nombre de ETA a la DYA de Álava no especificó en que campus universitario había sido colocado, por lo que la Ertzaintza pensó que se trataba del de Vitoria. La Policía autónoma comprobó que allí no había ningún Peugeot blanco y retiró el dispositivo.
En una breve declaración a los medios, el responsable del Interior ha dicho lo siguiente de la confusa llamada de ETA a la DYA de Álava: "Quien puso la bomba no avisó bien intencionadamente o bien se equivocó. Da lo mismo, podíamos haber tenido una tragedia enorme en la Universidad que afortunadamente no se ha producido".
Por otra parte, Rubalcaba evitó "hacer especulaciones" sobre si el atentado es una reacción de ETA a las detenciones de esta semana contra el grupo Navarra, pero advirtió: "Lo que quiero decir a todo el mundo es que nosotros vamos a seguir a lo nuestro y que los que han puesto este coche bomba, como los que fueron detenidos el lunes, van a acabar ante el juez e irán a prisión".
La Universidad agradece la serenidad de sus alumnos
Por su parte, el rector de la Universidad de Navarra, Ángel José Gómez-Montoro, ha condenado el atentado de "violencia irracional" sufrido hoy por este centro y ha agradecido la "serenidad" que han mostrado tanto los trabajadores como los alumnos. En declaraciones a los medios de comunicación en las proximidades del lugar de los hechos, Gómez-Montoro ha asegurado que tras los hechos él ha podido ver salir a los alumnos y trabajadores con serenidad y orden", una actitud que ha realzado.
El máximo dirigente del centro universitario también ha querido condenar este suceso, que ha calificado de "violencia irracional", pero ha asegurado que confía en que se confirmen de forma definitiva los datos y se compruebe que "efectivamente" no hay ningún fallecido ni heridos graves.
Pero, ante todo, Gómez-Montoro ha hecho hincapié en la transmisión de un mensaje de serenidad a los estudiantes y trabajadores del centro, así como a todas sus familias, y ha afirmado que la Universidad va a seguir trabajando en la docencia y en cumplir su servicio a la sociedad.
El máximo dirigente del centro universitario también ha querido condenar este suceso, que ha calificado de "violencia irracional", pero ha asegurado que confía en que se confirmen de forma definitiva los datos y se compruebe que "efectivamente" no hay ningún fallecido ni heridos graves.
Pero, ante todo, Gómez-Montoro ha hecho hincapié en la transmisión de un mensaje de serenidad a los estudiantes y trabajadores del centro, así como a todas sus familias, y ha afirmado que la Universidad va a seguir trabajando en la docencia y en cumplir su servicio a la sociedad.