Rubalcaba sigue sin contestar a nada que tenga que ver con el chivatazo, ni a los periodistas ni al PP. Interpelado por esta cuestión en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en concreto acerca de si sabía que se iba a producir la operación policial contra la red de extorsión de ETA que operaba en el bar Faisán y sobre cuándo tuvo conocimiento de que aquel operativo no se llevó a cabo por una delación, el ministro remite a las 270 respuestas que dio a los populares.
¿Y qué dice en ellas por escrito? "No"; "nunca"; "se desconoce"; se remite a lo que dice en el Congreso (o sea, nada) o se escuda en que la investigación judicial sigue abierta. En resumen, toda una tomadura de pelo.
Y en esta línea ha estado también ante la prensa. Al ser preguntado sobre si se siente acosado por el PP en este asunto, Rubalcaba ha recordado que ha contestado a 34 preguntas sobre el tema en sede parlamentaria y ha añadido que ha habido sesiones en las que se ha enfrentado a hasta tres preguntas mientras que en la última del pasado miércoles tan sólo le formularon una. "Así que un acoso de un tercio", ha dicho sonriendo el vicepresidente, que faltará a la próxima sesión de control y se librará así de más preguntas.
No sólo eso. El ministro se ha reído recordando las palabras del diputado del PP Ignacio Gil Lázaro, quien en esa última sesión de control le espetó que el caso chivatazo es su "tumba política". "Lo pensé y luego se me olvidó contestarle aquella frase de La venganza de Don Mendo (sic): ‘los muertos que vos matáis, gozan de buena salud’. Pues algo así". A este paso es posible que se le acaben las ideas.