El portavoz de ERC en el Congreso, Joan Ridao, ve "razonable" el nuevo modelo de financiación aunque no llega "al cien por cien" de sus aspiraciones, y por eso advierte de que a pesar de que hay "una senda de mayor entendimiento, eso no quiere decir que ERC se vaya a convertir en el felpudo del PSOE".
"Aquí no culmina nada, no hemos llegado a la cumbre", asegura Ridao en una entrevista, en la que, no obstante, afirma que el nuevo modelo es "mucho mejor que el anterior" y "razonable, teniendo en cuenta las circunstancias actuales".
Cierto es que los 3.800 millones de los fondos adicionales responden a las peticiones de ERC, sostiene su portavoz, pero su grupo no va a repetir la actitud de "aliado estable y permanente del PSOE" que mantuvo en buena parte de la pasada legislatura, sobre todo porque "Zapatero ha engañado a casi todo el mundo y la fiabilidad del Gobierno está bajo mínimos".
José Luis Rodríguez Zapatero, según Ridao, no ha sido "ni dócil ni procatalán" al negociar la nueva financiación; más bien lo que le ha llevado a atender las reivindicaciones de Cataluña es su "falta de estabilidad política" en el Congreso, apunta.
Porque si al principio de esta legislatura los socialistas "tenían cautivos" los votos del PNV y del BNG en el Congreso, la derrota en Galicia y el pacto de Gobierno con el PP en el País Vasco han cambiado el panorama en Madrid, y por eso no le ha quedado otra alternativa que volverse "hacia el catalanismo".
Bajo su punto de vista, "hubiera sido impresentable" que Zapatero llegase en enero a la Presidencia de la UE con problemas domésticos. Otro factor decisivo, según el portavoz independentista, ha sido el cambio de ministro de Economía.
Puigcercós y el “derecho a decidir”
Por su parte, el presidente de ERC, Joan Puigcercós, alertó de que los partidos catalanes que no apuesten por el derecho a decidir no tendrán el apoyo de su formación para gobernar. Eso, según él, supondría que los republicanos estén en la oposición, un "esquema muy posible".
En una entrevista en la revista El Temps, el líder republicano avisó que la próxima legislatura "tiene que venir marcada por el derecho a decidir", por lo que condicionarán sus pactos a este punto. "Tenemos que decidir nosotros solos; se ha acabado negociar", sentenció.
Por ello, destacó la importancia de la ley de consultas populares para "preparar" a Cataluña para decidir sobre impuestos, aeropuertos o Cercanías. No obstante, dijo que el Gobierno que quiera contar con su apoyo tiene que celebrar las consultas y que se cumplan, no como la del 'lehendakari' Juan José Ibarretxe.
Respecto al nuevo modelo de financiación autonómica, señaló que es bueno dentro de lo que permitía el Estatuto, pero indicó a CiU que si en el futuro consiguen presionar al Gobierno español para conseguir uno mejor tendrán el apoyo de los republicanos.
Además, se mostró precavido sobre el cumplimiento íntegro de lo pactado, por lo que ERC estará muy atenta a la modificación de la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (Lofca), por lo que presionará en el Congreso de Diputados y el Senado.
En este punto, remarcó que tres diputados de ERC en el Congreso "han hecho más fuerza que los 25 del PSC y los diez de CiU".