Arranca el curso político para el PP, que ha prolongado sus vacaciones navideñas hasta el próximo lunes. Ya ese día, Mariano Rajoy ha convocado una Junta Directiva Nacional con la intención de marcar la agenda de cara a los próximos meses. Fuentes de la dirección nacional han desvelado a Libertad Digital que la intención del líder popular es poner el acento en las venideras citas electorales que, según argumentan, "hay que empezar a preparar sin más demora".
La otra gran cita del PP para la próxima semana es la celebración de la primera Interparlamentaria del 2010, que se celebrará en Palma de Mallorca los días 15 y 16 en pleno polvorín político balear por la inestabilidad del Gobierno regional y los casos de corrupción.
El objetivo de Rajoy: enviar un mensaje de apoyo y fortaleza al actual presidente de la formación en las islas, José Ramón Bauzá, tras la convulsa salida de Rosa Estarás -ahora eurodiputada- y en un momento en el que el PP balear está más dividido que nunca.
En la mente de todos, según un dirigente de la plana mayor del partido en declaraciones a EFE, también estará el ex presidente balear Jaume Matas, presuntamente implicado en una trama de corrupción urbanística.
Con todo, para Génova, la elección de Palma es "acertada" porque "los ciudadanos se están dando cuenta de que el PP es el único partido que puede gobernar y dar estabilidad". El propio Rajoy proclama cada vez que se le pregunta que "el PP quedó a un escaño de la mayoría absoluta en el Gobierno de las Islas Baleares, a un escaño en el Ayuntamiento de Palma de Mallorca y a un escaño de la mayoría absoluta en el Consell Insular de Mallorca".
En síntesis, dos citas -"muy importantes" a juicio de la Presidencia popular- con las que el partido pondrá encima de la mesa su estrategia, basada en afianzar la imagen de alternativa al Gobierno y en proponer medidas que faciliten la recuperación de la recesión económica.