(Libertad Digital) En la entrevista concedida a César Lumbreras en Agropopular, de la Cope, Mariano Rajoy ha afirmado que "los demás sondeos en Internet dicen lo contrario" de su actuación en el Debate sobre el Estado de la nación. "Yo quedé satisfecho de cómo me salió pero no del contenido final", ha dicho el líder del PP, que quería hablar en el Congreso, ha continuado, "de la crisis y del miedo que tiene mucha gente a perder su trabajo".
"Todos los grupos pedimos" a Zapatero "una rectificación" y "he visto que el presidente no quiere rectificar", ha indicado Rajoy, para quien el jefe del Ejecutivo está cometiendo así "un gran error". La principal característica de su política económica, ha indicado, "es su improvisación" y la prueba está en los cambios de las últimas horas. "Son medidas cogidas por alfileres y las rectifica constantemente", ha insistido.
Sobre el PP y su papel en el Debate, ha insistido en que pidió al Gobierno "un plan completo que genere confianza", plan que, según ha dicho, tiene su partido. "Hay dos claves, el tema del crédito y la ayuda al pequeño empresario", ha explicado Rajoy antes de insistir en que su partido tiene "ese plan alternativo" y espera que "se debata" la próxima semana. Los puntos más importantes, la "austeridad" en las administraciones, la reforma fiscal dedicada al pequeño empresario, las reformas estructurales o la unidad de mercado. "Estoy seguro de que se puede hacer una política diferente con la que empezaríamos ya a ver la luz al final del túnel", ha concluido.
La decisión del Supremo y la pitada al himno
El presidente del PP ha hablado de otros asuntos, como el caso Gürtel para defender a Camps y Costa, la pitada al himno o la ilegalización de la lista de Alfonso Sastre, algo que ha calificado de "magnífica noticia". En su opinión, se trata de una decisión "muy importante y casi decisiva en la lucha contra el terrorismo". Para Rajoy, la medida, además, "va en línea con lo que se ha hecho en los últimos tiempos" y "en el camino que se está transitando con acierto para acabar definitivamente con quienes pretenden erigirse en jueces de la vida, de los derechos y de la libertad de los demás".
Sobre lo ocurrido en Mestalla, ha dicho que le generó una "impresión de preocupación y de tristeza". "Siempre es noticia lo anacrónico, lo que no es noticia es que la inmensa mayoría de los españoles están con el Rey, con España y con el himno nacional".
Rajoy y las críticas
Preguntado después por César Lumbreras sobre las críticas a su labor al frente del PP, Rajoy ha dicho que es "el líder de la oposición" y, por tanto, "una persona que estoy en los medios". "Hay libertad de expresión por fortuna", ha continuado el líder de los populares, para quien "todo el mundo tiene derecho a dar su opinión pero luego, la gente también juzga a quien da su opinión". "El que habla en una columna, en una radio, también está sujeto al juicio de la gente", ha dicho.
Para Rajoy, "en esta vida, que no es fácil, la clave es estar conforme con lo que estás haciendo, tener equilibrio y defenderlo". "Tengo la conciencia muy tranquila, tengo fuerza, ganas, ilusión y coraje para dar esa batalla", ha apuntado.
"Sorprendente, exótico y singular"
Por su parte, el vicepresidente del Parlamento Europeo, Alejo Vidal-Quadras, ha calificado de "sorprendente, exótico y singular" el estudio de opinión del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) hecho con motivo del debate sobre el estado de la nación.
Este sondeo del CIS es "muy sorprendente, exótico y singular" porque no coincide con ningún otro de los demás que se han hecho, según Vidal-Quadras, quien ha estimado que este estudio no tendrá la menor influencia en las elecciones.
El vicepresidente del Parlamento Europeo ha explicado que el próximo 7 de junio los ciudadanos decidirán qué fuerzas políticas consideran que van a representarles mejor en Europa y tienen las mejores políticas en las instituciones europeas para afrontar la crisis.
A su juicio, en el plano nacional, el voto de los ciudadanos también va a reflejar su opinión y su estado de ánimo sobre la gestión que el Gobierno de Rodríguez Zapatero está haciendo de la crisis.