Clamor contra el secretario de Estado de Cooperación Territorial, Gaspar Zarrías, quien el martes amparó con su presencia en un acto a favor del juez Baltasar Garzón proclamas guerracivilistas. Contundente, el líder del PP, Mariano Rajoy pidió su cabeza por participar en un “espectáculo” que tachó de “claramente antidemocrático”.
En declaraciones a los medios en Guadalajara, donde visitó junto con María Dolores de Cospedal y dirigentes del PP regional un centro de Proyecto Hombre, Rajoy pidió respeto para el Tribunal Supremo e insistió, “y así hay que decirlo porque es la verdad”, que el acto organizado por los sindicatos UGT y CCOO en la Universidad Complutense tuvo como objetivo amedrentar a los jueces, por lo que “ojalá no se vuelva a producir nunca”.
“Todas las personas, todas, desde la más importante en la sociedad hasta la más humilde, son iguales ante la ley, se llamen Garzón, Pérez o Fernández", añadió el presidente popular, quien puso en su diana a Zarrías, mano derecha del vicepresidente Manuel Chaves. “No debería seguir como secretario de Estado ni un minuto más”, sentenció; una opinión compartida tanto por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, como por la portavoz de UPyD, Rosa Díez.
En cuanto al “espectáculo” del martes, Rajoy recordó que el Partido Popular solicitó hace tan solo 24 horas el pronunciamiento urgente del Consejo General del Poder Judicial respaldando a los magistrados ya que, según dijo, “la independencia de los poderes es algo básico en democracia”.
Complicada rueda de prensa
Poco más dijo el líder de los populares, quien pidió “respeto” a los informadores por el lugar donde se encontraba. De hecho, uno de los inquilinos de las instalaciones reclamó a gritos que no se le preguntara por la actualidad. Pese a todo, Rajoy también opinó sobre el abultado patrimonio del presidente del Congreso, José Bono: “la claridad y la transparencia son lo mejor, y no quiero decir nada más”.
Rajoy sólo respondió a estas dos cuestiones, junto a otras sobre los estatutos catalán y castellano-manchego, para dar por concluida la breve rueda de prensa. En el tintero quedaron cuestiones tales como las declaraciones de Álvarez Cascos sobre el caso Gürtel o las últimas detenciones de dirigentes populares en las Islas Baleares.