Marruecos "dará al Gobierno español las explicaciones que haga falta" sobre los hechos acaecidos el pasado sábado en El Aaiún, en el Sahara Occidental, señaló el portavoz del Gobierno marroquí, Jalid Naciri, quien calificó lo sucedido como una "provocación" por parte de los activistas españoles.
"Si nos piden explicaciones, las daremos, porque somos un país responsable", dijo Naciri en declaraciones, al tiempo que transmitió una pregunta a las ONG españolas prosaharauis: "¿Cuál sería su opinión si organizaciones marroquíes entrasen en España para reivindicar la independencia del País Vasco?".
"Se trata de españoles que entraron como turistas, no como activistas, y los acogimos como hermanos. Súbitamente, se convirtieron en activistas del Polisario, con camisetas de Sahara Libre, banderas...", indicó Naciri, quien agregó que esto despertó la "cólera legítima y espontánea de la población" y condujo al "altercado".
El también ministro de la Comunicación aseguró que "la Policía no les golpeó, contrariamente a la versión de los españoles, sino que les protegió". Una de las españolas afectadas, Carmen Roger, activista de SaharAcciones, dijo este lunes a su llegada a Santa Cruz de Tenerife que los agresores "eran policías disfrazados de paisano, lo sabemos porque luego los vimos en comisaría, no es que nadie nos lo contara".
Sin embargo, Naciri insistió en que las fuerzas policiales fueron quienes consiguieron sacar a los españoles de la paliza y aconsejó a los activistas prosaharauis que "no repitan acciones como éstas si no quieren reacciones extremadamente violentas" de la población.
"Hay que decir a estas ONG que la provocación es inadmisible", recalcó, y consideró asimismo que el grupo de españoles "sirve, de manera consciente o inconsciente, a la agenda de Argelia".
Respecto a los orígenes del altercado, el portavoz apuntó hacia "medios hostiles a Marruecos en España, furiosos por el éxito de la visita de (el ministro español del Interior, Alfredo Pérez) Rubalcaba, y el final exitoso del conflicto en torno a Melilla". En efecto, el pasado 23 de agosto, el ministro del Interior visitó Rabat sin pasar por la ciudad española para intentar enterrar el conflicto.
Exteriores, con Marruecos
Mientras, el Ministerio de Asuntos Exteriores ha difundido una nota con las explicaciones ofrecidas por Rabat al Ejecutivo. En el comunicado, indican que Miguel Ángel Moratinos se puso en contacto con el Ministro de Asuntos Exteriores de Marruecos, Fassi Fihri y que, por su parte, el Secretario de Estado de Asuntos Exteriores e Iberoamericanos, Juan Pablo de Laiglesia, trasladó a su homólogo marroquí, Yusef Amrani, la preocupación de las autoridades españolas por lo sucedido. En concreto, que "los ciudadanos españoles puedan desplazarse a El Aaiún con plenas garantías".
En su respuesta a España las autoridades marroquíes dicen, según el Gobierno, que los activistas españoles "participaron en una manifestación ilegal y no autorizada durante la cual se produjeron enfrentamientos entre los manifestantes y ciudadanos marroquíes y que las agresiones a algunos de los activistas españoles se produjeron como consecuencia de estos altercados", según el comunicado.
Exteriores señala que las autoridades marroquíes han precisado que "la intervención de la policía marroquí tuvo como principal objetivo poner fin a estos enfrentamientos". Exteriores dice que "el gobierno español, comprometido con la defensa de los derechos de sus ciudadanos en el extranjero, reitera la necesidad de respetar la legislación vigente, y confía que estos incidentes no vuelvan a producirse".
El ministerio de Asuntos Exteriores concreta que tanto desde la Oficina del Depositario de los bienes del Estado en El Aaiún, como desde el Consulado en Rabat y la Embajada de España en Marruecos "se brindó a los activistas toda la protección consular requerida por las circunstancias, acompañándoles y asistiéndoles en todo momento hasta su embarque ayer tarde a Las Palmas de Gran Canaria".