El fiscal general del Estado, Cándido Conde Pumpido, ha pedido este jueves que la ley ponga fin a las "fiscalías paralelas" que defienden "intereses espurios" que ponen en jaque a la Justicia con "querellas mediáticas" que trasladan a la Administración "problemas que, o no existen, o no tienen como cauce adecuado de resolución el sistema de justicia penal sino que deben ser resueltas en el foro político o en otras instancias sociales".
Durante su intervención en un desayuno informativo de Entorno Empresarial patrocinado por Renfe y el Gobierno de Aragón, Conde Pumpido defendió que es el Ministerio Fiscal al que la Constitución encomienda la defensa y la promoción del interés general ante los tribunales, y apuntó que no es "casualidad" que en la mayoría de los países del entorno detente el ejercicio de la acción penal.
"No puede ser que la justicia penal, ya indebidamente sobrecargada, gire alrededor de querellas mediáticas interpuestas por fiscalías paralelas, en asuntos que tienen que ver con intereses particulares, de contenido más político que jurídico, a veces revestido de una vaga intervención de lo colectivo", aseguró.
En concreto, y en relación a las tres causas abiertas que hay en el Tribunal Supremo contra el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, recordó que el Ministerio Público no ha apreciado delito en las actuaciones que se le cuestionan y aseguró que seguirá manteniendo esta posición con la "esperanza" de que el criterio del Ministerio Público "finalmente prospere".
Además, Conde Pumpido pidió respeto a las instituciones del Estado y afirmó que las críticas al Tribunal Supremo "se han excedido notoriamente de lo razonable".