(Libertad Digital) Pese a asegurar que "el debate nominalista no tiene tanto valor", el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, insiste en que "Canarias es un país, un territorio diferenciado que presenta unas singularidades únicas que deben ser atendidas". Por ello, agrega, Coalición Canarias cree que las Islas deben tener "una relación bilateral con el Estado".
Aliado del Partido Popular en el Gobierno insular, CC aprobó en su congreso nacional una ponencia en la que definía a Canarias como una Nación. En una entrevista concedida a El Mundo, Rivero matiza: "una cosa es lo que proponen determinadas personas o lo que defienden miembros de la Juventudes y otra es la realidad, la ponencia no dice eso".
Eso sí, "en nuestras relaciones con Europa es necesaria la bilateralidad porque somos una comunidad ultraperiférica, y así está reconocida, al igual que ocurre con otros territorios muy alejados". Para Rivero, las "singularidades" de Canarias obligan a una "relación bilateral". "Pero eso no significa que esas relaciones se mantengan en un plano de igual a igual o desde un plano superior a uno inferior, significa que determinados problemas se tienen que discutir entre ambas partes, no en un foro del Estado con las 17 comunidades", asevera.
El presidente del Gobierno de Canarias insiste pues en "la asunción de competencias esenciales dada nuestra lejanía y la singularidad de nuestro territorio". No se siente más cerca ni del PP, con quien gobierna en las Islas, ni del PSOE, con quien alcanza numerosos acuerdos en el Congreso de los Diputados.
Ya en otro orden de cosas, Rivero dice de Fernando López Aguilar que "no le gustan las Canarias" y que "nunca le han interesado". "Por eso se va a Europa, porque prefiere hacer política lejos de las islas", añade.
Sobre la crisis económica, afirma que "cuando todos los nacionalistas la anunciaban, el Gobierno y el PSOE se empeñaron en mirar para otro lado y no se abordaron reformas estructurales".