Leire Pajín fue nombrada ministra de Sanidad en la última remodelación del Gobierno llevada a cabo por Rodríguez Zapatero. Según informa el diario de Intereconomía, tras llegar a su nuevo cargo convocó a todos los diputados y senadores de las comisiones dependientes de su Ministerio a una comida informal.
Uno de los comensales, según recoge el diario, cuenta que realizaron varias preguntas a Pajín pero que hubo una que no le gustó nada. Al parecer una senadora del Partido Popular preguntó a la nueva titular de Sanidad por el nombramiento como delegada del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas de Nuria Espí de Navas, amiga personal de Leire.
"Quien hizo esta pregunta estaba cuestionando el nombramiento porque esa mujer es auxiliar administrativa y no funcionaria, con lo que podría traerse de un nombramiento irregular. Y es que para ser director general o un cargo de rango similar hay que ser funcionaria de capacidad A o B".
La respuesta de Pajín fue clara y no evitó contestar de manera grosera: "Sólo faltaría que la ministra no pueda nombrar a quien le salga de los cojones". Justificó su nombramiento aduciendo a que es su "amiga" y a "que sabe muchísimo sobre drogas".