La entrevista se desarrolla en un tono informal que Leire Pajín se toma al pie de la letra. En ella habla de su infancia, de su "precoz" entrada en política, de sus posibles compañeros de fiesta y también de feminismo.
Pajín cuenta que cuando era niña ya "daba mitines delante del espejo". Y presume de haber aprendido a hablar antes que a andar. Para el futuro le gustaría un nuevo Ministerio, el de Cooperación. "Para España, no para mí", aclara.
Dice Pajín que el socialismo le sabe "dulce" y a "igualdad". Y en algunos momentos se queja del contenido de algunas preguntas porque, en su opinión, no se las harían a un hombre.
En su opinión, siendo mujer, o "tía", como ella dice, tener responsabilidades políticas resulta más complicado: "Te lo hacen más difícil. Y tía, y joven, tienes todas las papeletas". "Yo quiero que el poder sea más tía", confiesa.
En otro punto de la entrevista, el periodista le pregunta a quién elegiría, del principal partido de la oposición, para salir "de farra". "Los de mi pandilla de toda la vida son de Nuevas Generaciones, de Juventudes Socialistas y de IU de mi pueblo… Me iría con Soraya", apunta.