Tal y como publica este sábado el diario El Mundo en una información que firma Ángeles Escrivá, el proetarra Otegi habría dicho sobre ETA que "los tienen machacados" o que la banda ya es "de chiste". Tampoco contemplaría la posibilidad de un atentado porque "no creo que sean tan cabestros" y quiere que "me saquen de una puta vez" de la cárcel.
Este es el resumen que hace el rotativo que dirige Pedro J. Ramírez de una conversación captada el 2 de marzo en prisión a Arnaldo Otegi mientras charlaba con uno de los amigos que le visita. El periódico aclara que Otegi era consciente de que su conversación estaba siendo grabada y que, por este motivo, en algunas ocasiones hablaba de "manera críptica". Incluso, en algún momento de la conversación señala que "la gente todavía no ha encontrado una explicación al fracaso de la tregua anterior".
En esta conversación, Escrivá atribuye a Otegi las siguientes palabras: "Ya les dije que no, que ya no. Las conclusiones están ahí. La gente quiere esto y ellos tienen dos posibilidades: o se suman a la procesión o se suicidan". De igual manera la información señala que Otegi se refiere a la dirección de ETA "con inusual dureza" y descalificación.
Declaración de Alsasua
El Mundo recuerda la declaración de Alsasua, ganadora según esta información, en el supuesto debate interno en el seno de la organización terrorista entre quienes pretendían una estrategia sin armas (ganadores) y los que seguían empeñados en el terror. Siempre según El Mundo, los partidarios de seguir con los atentados suscribieron la declaración pero dejando claro que "la administración de los atentados era potestad suya", dice Escrivá. Por otro lado, tampoco los firmantes de dicha declaración han pedido a la banda que deje de atentar.
Mediadores internacionales
Escrivá indica en su información que la conversación captada a Otegi también refleja que han logrado la participación de Eusko Alkartasuna y que un grupo de mediadores internacionales está intentando conseguir una tregua. Posibilidad con la que Otegi se muestra optimista, dice el diario.
A continuación, El Mundo reproduce algunos fragmentos de la conversación de Otegi en los que interpreta que el proetarra apuesta claramente por el fin de los atentados. Una interpretación que apoya en frases como "si lo hacen (atentar) se caen con todo el equipo porque nadie lo entiende y la gente va a pensar que estamos locos" o "ya les dije que ya no. Las conclusiones están ahí, la gente quiere esto y ellos tienen dos posibilidades, o se suman a la procesión o se suicidan. La gente votante, la que ve lo del Aberri y ve lo del documento de Alsasua ¿qué está esperando? ¿lo otro (un atentado)?, vale, yo me quito".
Otegi también intenta convencer de que su insistencia en negar la condenación de la violencia de ETA es más una impostura necesaria por los acuerdos internos con los miembros de la banda que por su verdadero interés. De hecho, sólo un mes antes de que fuera grabado en prisión, Otegi se negó a condenar a ETA delante del juez.
Las visitas a Otegi
Escrivá también informa de que "la cúpula de ETA" presionó a Otegi para abortar el debate que culminó en la declaración de Alsasua. Entre estos etarras, destacan "Francisco Múgika Garmendia, "Pakito", ex número uno de la banda y José María Olarra, veterano de la mesa Nacional de Batasuna". Unas visitas que, según este periódico, intentaban convencer a Otegi de que el camino correcto era el de los atentados.