Fotografía en el Congreso para hablar de la nefasta gestión del Gobierno, en Génova para tratar de la situación interna del PP y frente a una oficina de empleo, rodeado de parados -"Mariano, sácanos del paro", le suplicó uno de ellos-, para dar su receta ante la recesión económica. Mariano Rajoy protagoniza este domingo una extensa entrevista en el diario El Mundo en el que se muestra convencido de que ganará las próximas elecciones.
En clave interna, el líder de los populares asegura que "en principio" habría congreso del partido antes de las elecciones generales y que él será el candidato y aspira "a contar con el apoyo de todo del PP".
Preguntado por el caso Gürtel, reconoce que "desde luego beneficiar no ha beneficiado nada", y apostilla: "maldita la gracia que me ha hecho a mí y a todos los militantes del PP que eso se haya producido". Dicho esto, Rajoy se muestra convencido de que su partido no se ha financiado de forma irregular a través de la trama.
Esperanza Aguirre, Alberto Ruiz Gallardón y José María Aznar también son protagonistas de la entrevista. Sobre el conflicto de los dos primeros, afirma que "hoy es bastante menos conflicto y ha sido bastante menos conflicto de lo que a veces se dice". "Lo que pasa es que hay cosas que tienen morbo y además se exageran", continúa.
En cuanto al ex jefe del Ejecutivo, destaca que la relación "es muy buena" y pone como ejemplo que sólo en diciembre le vio dos veces; en una copa de Navidad y en el Patrocinio de FAES.
Ya en un ámbito más personal, asegura que le produce "pudor" hablar de sus "puntos fuertes" y recalca, al ser preguntado si es un hombre de convicciones, que es "pecador" y que tiene "defectos", algunos "muy chungos".
"Lo de la ideología es demagogia barata"
En página económica, parte de la base de que si llega a La Moncloa el paro bajará e incide en que "la subida de la tasa de ahorro es la prueba inequívoca de la desconfianza que genera el Gobierno".
Critica todas las medidas del Ejecutivo contra el desempleo. "No es el momento de bajar el IRPF. Hay que bajar el IVA y recortar el impuesto de sociedades en cinco puntos a las PYMES", receta. Además, asegura que "sin duda congelaría el sueldo de los funcionarios para reducir el déficit, bajar los impuestos y facilitar la creación de empleo".
"Yo apoyo un contrato con menos indemnización siempre que se vincule a más estabilidad", anuncia en otro momento de la entrevista, en la que las pullas al Ejecutivo han sido una constante: "lo de la ideología es demagogia barata. Cuando uno gobierna con más de cuatro millones de parados, hace la política más antisocial".
En definitiva, sentencia Rajoy, "éste no es un Gobierno en el que se sienta representada la mayoría" y tiene más ejemplos para argumentarlo como el chivatazo a ETA o las presiones de los socialistas al Tribunal Constitucional por el Estatuto catalán. "Lo del PSOE me parece patético. Montilla a quien debía pedir explicaciones por el Estatuto es al señor Zapatero", apunta.
Pese a todo, y ante la avalancha de medios extranjeros criticando a Zapatero, recalca que no le gusta que nadie hable mal de España "aunque sea" del jefe del Ejecutivo.