Montilla ha guardado un secretismo total respecto a la fecha de las elecciones, a pesar de lo enrarecido de un ambiente en el que ERC dio por acabado el tripartito, después de que saliera el fallo.
La Razón publica el sábado que Montilla podría haber agotado su plazo y estar a punto de dar a conocer la fecha de los comicios catalanes. Ha venido prolongando la espera a pesar del clima de crispación levantado a raíz de la sentencia del Estatuto, pero prometió despejar la incógnita para que los comicos no coincidiesen con la visita del Papa el próximo 7 de noviembre, por lo que la decisión puede estar a punto de producirse.
El margen para convocarlas es reducido, y se queda en el domingo 24 de octubre o los domingos de noviembre posteriores a la consagración de la Sagrada Familia. De modo que, según La Razón, gana peso el día 28 para evitar que se empañe la visita papal. Todo ello pese a que el compromiso de Montilla con el Nuncio se circunscribe al 7-N.
El 31 de octubre, según el diario, es poco recomendable pese a que el día 1 se cumplirían cuatro años exactos de las anteriores elecciones, pero la festividad de Todos los Santos en lunes juega en contra. Además, se descarta que los comicios se celebren en diciembre pese a que el Estatuto da margen suficiente, hasta el día 12.
La Razón continúa desgranando la comprometida situación del presidente de la Generalidad. Si Montilla escucha al sector del PSC paartidario de convocarlas el 24 de octubre, la incógnita debería despejarse como mucho el lunes, fecha que permiten los 55 días de plazo de la Ley Electoral.
Montilla no ha disfrutado de sus habituales vacaciones en las playas de Granada, y se ha quedado en Cataluña preparando los comicios con diferentes encuentros y una apretada agenda de actos. Pese a todo, las encuestas siguen pronosticando un batacazo del tripartito y el consiguiente triunfo de CiU.
Camacho pide que no "prolongue la parálisis"
La presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, ha pedido a Montilla que "convoque elecciones la próxima semana con el inicio del curso político", según un comunicado de esta formación política.
La presidenta del PPC ha añadido que "si Montilla mantiene un mínimo de responsabilidad debe saber que no es bueno para los catalanes prolongar la parálisis del gobierno tripartito. Los catalanes no pueden esperar más a que haya un cambio".
La presidenta del PPC ha hecho estas declaraciones en su última visita a las fiestas del barrio de Sants acompañada por el presidente del grupo municipal Popular en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández.
En la misma línea, la presidenta del PPC ha manifestado que "en Cataluña la alternativa al tripartito no es un gobierno de CiU que busca la independencia sino un partido serio como el Partido Popular que se preocupe por resolver los problemas reales de los catalanes".
Para Sánchez-Camacho, "Cataluña necesita una alternativa con seriedad y sentido común, un gobierno que sepa priorizar la salida de la crisis y se deje de aventuras independentistas y nacionalistas". "Cataluña necesita un gobierno que lleve a cabo nuevas políticas de inmigración, aporte soluciones a la crisis, políticas de lucha contra el paro y contra la inseguridad ciudadana".
Por eso, la presidenta del PPC considera que "plantear referéndums independentistas como objetivo significa buscar la inestabilidad política en un momento de grave crisis económica y es la demostración de que hay partidos políticos especialistas en crear problemas en lugar de solucionarlos".
Sánchez-Camacho ha insistido en que con la grave crisis económica "la independencia que busca CiU no es la alternativa al tripartito. Lo que menos necesitan los catalanes es que se les creen más problemas, intranquilidad e incertidumbre".