Dentro de la escalada de declaraciones desde Cataluña sobre el Tribunal Constitucional, el líder de CiU, Artur Mas, se ha desmarcado este jueves con la propuesta de dejar sin funciones al organismo. La razón, que, según él, lo que vota el pueblo "tiene que ir a misa".
En declaraciones a Antena 3, consideró que las leyes son las que están al servicio de la democracia porque, si no, "se va a pique" la esencia de la democracia, el voto. Abogó por una reforma de la ley del TC para que no pueda pronunciarse sobre leyes aprobadas, ya que, en su opinión, no se puede establecer un "choque" de legitimidades entre los votantes y un tribunal, "peleado y dividido".
Añadió que el Estatut fue un sueño y se convirtió en una pesadilla, de la que Cataluña "no se ha repuesto". Apuntó que salió aprobado con el 89% de los votos en el Parlamento catalán, mayoría absoluta en las Cortes, y que el 74% de los catalanes votaron sí en el referéndum. No habló, sin embargo, de la altísima abstención registrada: poco más del 30% de los convocados se acercaron a las urnas.
Respecto a las elecciones catalanes, Mas aseguró que Cataluña necesita tener un gobierno fuerte, con un liderazgo potente y que "no sea un galimatías" como opinó han sido los tripartitos. Dijo que no acudirá al notario, pero que "ni muchísimo menos" quiere decir que pactará con el PP.