L D (EFE) En la rueda de prensa posterior a la reunión, Maragall afirmó que el jefe del Ejecutivo es “favorable” a su propuesta de reconocer explícitamente en la Constitución las nacionalidades históricas. Sin embargo, también en el Palacio de la Moncloa, el ministro de Administraciones Públicas aclaró después que no lo podía “ni confirmar ni desmentir” y se remitió a la modificación de la Constitución planteada por el Gobierno, que contempla cuatro reformas concretas: sucesión monárquica, Senado, nombre de las Comunidades Autónomas y Constitución Europea.
Maragall lleva el "estado catalán" a La Moncloa
Sobre la reforma constitucional y los objetivos de Maragall, también le recomendó Jordi Sevilla que si "alguien tiene alguna propuesta más, que la haga". El ministro compareció después de que lo hiciera el presidente catalán. En su primera reunión oficial con Zapatero, Maragall señaló que "sobre la base de la confianza federal tiene que producirse un diálogo de fondo sobre la nueva etapa del desarrollo autonómico y la actualización constitucional". En la entrevista, el líder catalán Maragall comunicó al presidente del Gobierno que Cataluña "es Estado y va a ejercer Estado".
Se refería a su postura ante el debate constitucional. En esa etapa, matizó, "la idea de la España plural tiene que ir concretándose con fórmulas jurídico-políticas y reformas estatutarias y constitucionales que reconozcan la singularidad de las tres nacionalidades históricas y de la Comunidad Foral de Navarra". El presidente de la Generalidad también se refirió a poner en marcha la transformación del Senado en una Cámara de corte federal "siguiendo el modelo alemán" y expuso el compromiso que Zapatero para potenciar la participación de Cataluña en la conformación de la política internacional española.