(Libertad Digital) El presidente del PP, Mariano Rajoy, se llevó el protagonismo del acto institucional que anualmente organiza la Generalidad en el Palacio de Pedralbes por la fiesta de Sant Jordi. Incluso cuando los consejeros posaban para la fotografía oficial del Ejecutivo regional en la escalinata del palacio, Rajoy se marchaba, por lo que muchos fotógrafos dejaron de enfocar al ejecutivo catalán, para enfocar su objetivo en él.
Lo cierto es que el día ha sido intenso para el líder de los populares, que se ha reunido durante 30 minutos con el presidente José Montilla. El encuentro ha sido "cordial", según las palabras del propio Rajoy.
Además, el presidente de los populares ha acudido, junto a la líder del PPC Alicia Sánchez Camacho, al stand de su partido para realizar la habitual compra de libros. Momento en el que un reducido grupo de radicales ha intentado torpedear la visita. Ha sido recibido por gritos de "fascista, fascista".
Y es que la visita de Rajoy no ha gustado a todos. El secretario general de ERC, Joan Ridao, ha tachado de "provinciano" que el líder del PP, Mariano Rajoy, haya acudido al acto oficial de la Generalidad. Según ha indicado Ridao, "somos un país acogedor y, por tanto, no irá mal que venga aquí para ver realmente que en Cataluña no se persigue el castellano, y quizás con un poco de suerte al final de la jornada retira el recurso contra el Estatuto".
Después de espetar que no cree que "en un día como hoy Rajoy se atreviese a plantar mesas por todo el país recogiendo firmas en contra del Estatuto, cuando en realidad eran firmas en contra de Cataluña", el secretario general de ERC lamentó que no vaya a retirar su recurso ante el Constitucional.