(Libertad Digital) La base General Morillo, sede de la Brilat de Pontevedra, ha acogido el funeral de Estado de los militares fallecidos en el atentado suicida de Afganistán, el brigada Juan Andrés Suárez García y el cabo Rubén Alonso Ríos.
Los Príncipes de Asturias encabezaron la delegación de autoridades en esta ceremonia, oficiada por el arzobispo general castrense Juan del Río. Los actos transcurrieron en el patio central del acuartelamiento, ante el monumento a los caídos y con la bandera nacional a media asta.
Parte de la tropa había formado media hora antes del acto fúnebre y también ocupaban sus puestos diversas autoridades civiles, como el vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, el presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, y las conselleiras de Política Territorial, María José Caride, y Sanidade, María José Rubio.
Posteriormente, llegaron los familiares de los fallecidos y los militares heridos, acompañados por miembros del ejército y, a esta comitiva, se sumaron el portavoz del PSOE en el Congreso, José Antonio Alonso, y su homóloga en el PP, Soraya Sáenz de Santamaría, junto con la diputada popular Ana Pastor.
Finalmente, se incorporaron los Príncipes de Asturias, seguidos del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y la ministra de Defensa, Carmen Chacón, con el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño y el delegado del Gobierno en Galicia, Manuel Ameijeiras. Por detrás, se situaron el presidente del Congreso, José Bono, la ministra Elena Espinosa y el presidente del PP, Mariano Rajoy.
Lo primero que hicieron los Príncipes a su llegada fue acercarse a las viudas de los fallecidos y a los demás familiares , que no pudieron reprimir el llanto al recibir las condolencias de la familia real. Puntualmente al mediodía, mientras se interpretaba una marcha fúnebre, los féretros cubiertos con la bandera de España fueron trasladados a hombros por miembros de la Brilat hasta el altar, donde había depositadas varias coronas de flores.Una vez concluida la ceremonia religiosa, el Príncipe Felipe se acercó hasta el feretro de ambos soldados, cubierto con la bandera de España, y les condecoró a título póstumo con la Cruz al Mérito Militar con Distintitvo Rojo .
"Con su muerte han sembrado los valores que hacen grande a la humanidad"
Durante su homilía, el Arzobispo Castrense, Juan del Río Martín, ha asegurado que los dos militares españoles fallecidos fueron "soldados valientes de España" que han dado sus vidas "por la paz y la libertad de allí", que es "nuestra paz y nuestra libertad". "Ellos, con su muerte, han sembrado y siembran los valores que hacen grande a la Humanidad, los valores de la paz, la libertad, el progreso, la ayuda solidaria. La paz de allí, la libertad de allí por la que ellos han dado la vida, es nuestra paz y nuestra libertad", ha aseverado.
El vicario general castrense se ha dirigido a los familiares y amigos de los dos militares al asegurar que "nos sentimos invadidos por la impotencia hacia el terror, la violencia" porque "cuando se siembra ayuda humanitaria, valores democráticos, libertad y paz, si todo eso es bueno para la sociedad, ¿cómo recibir esta recompensa? " Hoy aquí, en Galicia, todo el mundo os quiere consolar ", ha subrayado Del Río, quien ha añadido que "hombres y mujeres de buena voluntad queremos daros lo mejor que tenemos, el sentimiento, la cercanía, el afecto".