El socialismo andaluz vive una crisis sin precedentes. Griñán le ha declarado la guerra Chaves y como consecuencia ha caído uno de los más estrechos colaboradores, Luis Pizarro. Ahora la batalla contra el vicepresidente tercero puede centrarse en su familia, concretamente en sus hijos.
Tras la polémica de los diez millones que Chaves dio a Matsa, empresa de la que su hija Paula era apoderada, ahora en el PSOE andaluz temen que los negocios de otro de sus hijos, Iván, les estalle en la cara.
Según informa El Mundo, las actividades de Iván como comisionista han hecho saltar las alarmas entre los socialistas andaluces por la tarea de intermediario que realiza con varias empresas aprovechando sus circunstancias familiares.
Ivan Chaves empezó a llamar la atención cuando se hizo cargo de la comercialización del alquiler de los locales del proyecto urbanístico Metropol-Parasol, realizado por el Ayuntamiento de Sevilla del socialista Monteseirín. El hijo del ex presidente de la Junta se lleva una comisión por este negocio.
En este sentido, la empresa encargada de la comercialización, de la que es administrador único, es Cexmark Soluciones, constituida en 2006. El hijo de Chaves se hizo con 30 de las 31 participaciones de la compañía. La otra se la quedó su cuñada.
De este modo, varias vallas de Sacyr y del Ayuntamiento de Sevilla invitan a alquilar los locales llamando a un número de teléfono y que corresponde a Javier Olaegui, socio de Ivan Chaves en Núcleo de Inversiones y Negocios SL, otra de las firmas en las que aparece el hijo del presidente del PSOE y que se dedica a la "compraventa y/o arrendamiento de inmuebles".
En el PP han hecho públicas sus sospechas sobre Ivan Chaves. "Podría ser una coincidencia, pero cuando las coincidencias se repiten, dejan de ser coincidencias y son cuestiones planificadas", dijo Beltrán Pérez, concejal del PP de Sevilla.