"Soy de los que piensan que no hay textos sagrados y todos los textos se pueden adaptar a las nuevas necesidades", han sido las palabras de López en pleno Congreso de los Diputados en Madrid el día del aniversario de la Constitución Española.
López ha considerado que, no obstante, "cualquier reforma debe nacer del consenso, cualquier viaje debe ser hacia delante".
El lehendakari apuesta, en la misma medida, porque dichas reformas no sean un viaje "hacia atrás" ya que "con menos consenso, no merece la pena". López ha puesto también en valor y prestigiar el Estatuto de Guernica en sus declaraciones en el Congreso.
Quiroga pide lealtad y consenso
La presidenta del Parlamento Vasco ha asegurado que "para una persona de mi edad, que representa una generación en la que no teníamos conciencia de lo que estaba ocurriendo, es necesario poner en valor lo que supuso aquella norma". Ha reivindicado "la capacidad de consenso que tuvieron los padres de la Constitución" y ha pedido, en sus declaraciones, "dejar de lado sus posiciones partidistas de cara a un consenso".
Quiroga ha manifestado, en igual línea que López, que hay que "pedir lealtad a esa Constitución, una lealtad que supone que si se necesita una modificación, se haga respetando los procedimientos que hay en esa misma Constitución" para hacer frente a cualquier tipo de reforma, pidiendo un consenso igual o mayor que el de 1978
Urkullu y el "disgusto de los vascos"
Por su parte, Iñigo Urkullu se ha manifestado en distinta línea. El presidente del PNV ha asegurado que "los vascos" ven con "disgusto" la presencia del lehendakari, Patxi López, en los actos oficiales con los que se conmemorara en Madrid el XXXI aniversario de la Constitución Española.
Urkullu, en un artículo de opinión que publica en "El Correo", ha considerado que la conmemoración de este aniversario es "un buen día para reconocer que Euskadi tiene pendiente su propia transición y que el Estado tiene pendiente su segunda transición".
El dirigente nacionalista expresa su satisfacción por el acuerdo alcanzado para el "blindaje" de las normas tributarias vascas. "Un pacto de Estado, bilateral, que respeta la singularidad vasca, actualizando nuestro derechos históricos" y que constituye "un modelo de referencia" para el futuro.
El presidente del PNV expresa su también su "alarma" ante un Gobierno vasco "sin programa, bisoño e inactivo" al que, además, culpa de llevar a cabo "un proceso de desaceleración del autogobierno, una pretendida dilución de la identidad vasca"