L D (Europa Press) Zaplana compareció en rueda de prensa en la Cámara Baja para hacer balance del primer año de legislatura. Respecto al "incumplimiento masivo" de las promesas electorales de Zapatero, el PP ha elaborado un documento que recoge el incumplimiento de un centenar de medidas en las que, según su análisis, el PSOE "sustanció" su campaña de 2004 y que ahora "han pasado al baúl de los recuerdos y al olvido más absoluto". Estas '100 promesas incumplidas' afectan a todos los ámbitos desde la política social a la económica.
En cualquier caso, los 'populares' consideran que lo "más grave" de este primer año es que el Ejecutivo "no ha gobernado para todos los españoles, sino para unos pocos", fomentando así la "división y la confrontación" en la sociedad. Según Zaplana, lejos de practicar la defensa de la "pluralidad" de la que hacían gala, los socialistas están teniendo uno de los "comportamientos más sectarios que se han conocido". "Quien no comparte su ideología radical no tiene sitio en el esquema de sociedad del PSOE", denunció Zaplana.
Asimismo, acusó al Gabinete Zapatero de estar "prisionero" y "sometido al chantaje" de sus "socios nacionalistas radicales", pese a que éstos representan a "una parte muy menor de la sociedad española". También criticó que el PSOE hablase de "solidaridad" y ahora "discrimine" a algunas autonomías con su política hidrológica y de infraestructuras y que haya sembrado "incertidumbres" y un "evidente riesgo de ruptura" por no tener un "modelo territorial".
Regularización de inmigrantes: Un proceso "descontrolado"
Descalificó también el proceso de regularización de inmigrantes puesto en marcha por el Gobierno porque está siendo "un verdadero desmadre", y está "descontrolado y descoordinado". Aunque avanzó que no quería "cebarse" con la política de vivienda, subrayó que el acceso a la misma es ahora más difícil que hace un año porque los precios han subido un 17,4 por ciento. A juicio de Zaplana, el Gobierno está frenando la "modernización" de España que se inició con el PP y "vive de las rentas" de su "buena política económica" porque carece una propia. Así, señaló que por primera vez en nueve años, España ha dejado de "converger" con Europa, que la inflación ha subido casi un punto y medio, la temporalidad laboral se ha incrementado del 31,6 por ciento al 32,9 y la inversión extranjera ha caído un 73 por ciento.