(Libertad Digital) Los sindicatos que este jueves reventaron la sesión en la Asamblea de Madrid –donde están los representantes elegidos democráticamente por los madrileños– no sólo han justificado la violencia verbal, con amenazas como "la próxima visita será con dinamita", y física, lanzando todo tipo de objetos contra el edificio, sino que encima no se les puede criticar.
Según informa Europa Press, dicen que el escuadrón de energúmenos que impidió este jueves el normal desarrollo de la sesión parlamentaria protagonizaron una "protesta pacífica" y que se les quiere "criminalizar". Los liberados sindicales de CCOO y UGT –que viven a costa de los impuestos de todos– dicen, con la chulería propia de todo totalitario que se precie, advierten, además, que "no van a permitir que nadie criminalice a los trabajadores por defender sus derechos y hacer uso de su derecho constitucional a manifestarse".
Un tal Agustín Martín, liberado sindical de CCOO, negó primero "categóricamente" la manifestación que tuvo lugar en el exterior del Pleno hubiera lanzamientos de objetos contra la Asamblea. Al parecer se lo inventaron los periodistas allí presentes. Pero después de negarlo "categóricamente", dijo que "no vamos a permitir que se manipule un momento de tensión en una concentración".
La culpa de todo, como siempre que estos señores hablan, es del PP. Del PP de Madrid. Curiosamente hace sólo dos días, la portavoz parlamentaria del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, los recibió encantada en el Congreso de los Diputados y les pidió "ayuda" para salir de la crisis.
El representante de CCOO acusa al Gobierno madrileño de inventarse de los incidentes como "cortina de humo". "Se pretende instrumentalizar la concentración y desatender la problemática del sector industrial en la Comunidad", aseveró el liberado de CCOO ya mencionado antes.
También habló de la concentración otro liberado sindical de CCOO. Éste dice ser portavoz de Política Institucional y se llama Jaime Cedrún. Por supuesto tampoco condenó la violencia y en el mismo tono chulesco que su colega dijo que es "absolutamente lamentable" que se "criminalice a los trabajadores como si fueran terroristas y vándalos" e insistió en que la protesta fue "pacífica".
Por parte de UGT más de lo mismo. En nombre del sindicato del PSOE habló su liberado, otro más, Mariano Hoya, que lamentó que la Mesa de Negociación se encuentra "empantanada" por culpa de la falta de diálogo del Ejecutivo de Aguirre. "En vez de buscar falsos culpables, el Gobierno regional y la Asamblea de Madrid deben ponerse a trabajar para hacer frente a la crisis que golpea a la Comunidad de Madrid", reseñó Hoya.
Otra liberada del sindicato socialista llamada Isabel Navarro dijo, sin sonrojarse, que la Comunidad de Madrid ha pasado de ser "locomotora en la creación de empleo" a ser "locomotora" en la destrucción de puestos de trabajo. Tanto le preocupan los "intereses de los trabajadores" a esta señora que no perdió la oportunidad para utilizar el "caso Gürte l", muy relacionado, como es evidente, con la problemática laboral en España.