LD (Pedro de Tena) El Ministerio de Administraciones Públicas divide a los trabajadores de las Comunidades Autónomas en funcionarios y laborales de la Administración General, trabajadores de la enseñanza y trabajadores de la Sanidad. Además, especifica el número de trabajadores de la Justicia. Este es el cuadro decisivo de enero de 2008:
Como puede comprobarse, hay 40.290 personas, entre funcionarios y laborales, en la Junta de Andalucía. Según esta cifra, el porcentaje de funcionaros de libre designación sería ya del 7,17 por ciento. Incluso si le añadiéramos los funcionarios transferidos de la Administración de Justicia, que son 8.270, el número total de funcionarios y laborales en la Junta sería de 48.560 y el porcentaje de los de libre designación estaría en torno al 6 por ciento(5,96).
Pero es que la consejera se refirió a "funcionarios" de la Junta. Los funcionarios de la Junta, plazas conseguidas "teóricamente" por oposición (no todos las han conseguido así), son aproximadamente, según fuentes sindicales, 23.000 y siendo el número de laborales, que no son funcionarios, de 25.000(incluyendo los funcionarios de Justicia en el lote). Eso querría decir que si tenemos en cuenta sólo a funcionarios, el porcentaje de personas de libre designación ascendería al 12,56 por ciento del total.
Sin embargo, y además de "libre designación" no es un concepto asimilable al tradicional y tramposo "a dedo". El otro día comprobamos cómo la Diputación de Sevilla, por ejemplo, había metido a dedo en solo un año a 397 personas. Hay ocho diputaciones controladas por el PSOE y siete de ellas las controla desde 1979. ¿Cuánto de su personal actual ha entrado a dedo desde 1979?
Lo mismo pasa en los más de 500 ayuntamientos que controla el PSOE desde 1979 por mayoría absoluta. Además del considerado de "libre designación", están incluidos los colocados a dedo desde 1979.
Por poner otro ejemplo, digamos que la Junta de Andalucía no convocó oposiciones oficiales hasta 1990, por lo que cabe preguntarse cómo y con qué procedimientos entraron los primeros funcionarios preautonómicos y transitorios. Además, hay que preguntarse cómo han entrado la mayoría de los "laborales" e "interinos".
Consecuentemente, la señora Consejera o desconoce el número de funcionarios reales de la Junta o intencionadamente ha tratado de confundir al personal para rebajar el peso de la estadística del personal de libre designación. Y luego, torticeramente, introduce la confusión al equiparar "personal de libre de designación" con "colocados a dedo". Ni siquiera Manuel Chaves está de acuerdo con ella, porque habla de 5.000 colocados a dedo, otra confusión. ¿Tal vez 50.000?