L D (Agencias) El acuartelamiento Millán Astray, nombre que recibe de uno de los fundadores de la Legión, acogió este sábado este acto en el que el guión y los cinco banderines de la Bandera "Carlos V" dejaron para siempre la formación para ocupar un lugar preferente en la Sala Histórica del Tercio.
El acto, presidido por el comandante general de Melilla, César Muro Benayas, se enmarcó en la celebración de un "Sábado legionario", al que acudieron también 34 miembros de la Asociación de Veteranos de la Legión, quienes se reencontraron con la unidad a la que sirvieron hace ya décadas.
Durante su alocución, el jefe del Tercio Gran Capitán, el coronel Fernando Ortiz, resaltó la importancia de la desaparición de la II Bandera, que vino motivada por la reestructuración que vive el Ejército como consecuencia de su profesionalización.
El coronel Ortiz recordó que la historia de la II Bandera, ya disuelta, estuvo plagada de acciones en combate, sobre todo ligadas a la ciudad de Melilla. Precisamente en el año 1921, tras el desastre de Annual, sus componentes contribuyeron a la salvación de la ciudad, al tiempo que participaron también en el desembarco de Alhucemas en 1925.
A la II Bandera, en concreto a su sexta compañía, también pertenecía el cabo Baltasar Queija, que entró en la historia militar española como el primer fallecido en combate de la Legión.
"Sé positivamente que, aunque haya dejado de existir como unidad en fuerza, no lo hará nunca del corazón de los que formaron en sus filas", ha asegurado el jefe del primer Tercio.
La disolución de la II Bandera se produce después de que el pasado año el Plan de Reestructuración del Ejército motivara también la desaparición de la V Bandera, con sede en Ceuta.