Las aguas del Peñón se están convirtiendo en un polvorín debido a los múltiples incidentes, que van en aumento, entre la Royal Navy y la Guardia Civil. Sin embargo, hay un matiz importante y es que los británicos actúan con gran agresividad mientras el Instituto Armado no tiene directrices y su única orden es realizar informes y no crear tensión. Todos estos sucesos se producen entre la indignación de los guardias civiles, desesperados por tener las manos atadas.
Según informa El Mundo, el último gran incidente se produjo el pasado miércoles cuando una de las patrulleras de la Guardia Civil, la Algeciras M-22, navegaba por la zona del Peñón de Gibraltar se llevó una desagradable sorpresa.
A unas siete millas de Punta Europa, ya en aguas internacionales, avistaron una embarcación que parecía un pesquero por lo que se acercaron a ella. Cuando estaban más cerca vieron que era una patrullera de la Armada Británica que procedió a recoger una boya de manera donde practicaban prácticas de tiro al percatarse de la presencia de la Benemérita.
En el informe de la Guardia Civil se dice que sobre la boya había una bandera "con los colores de la española" y que la embarcación británica "llevaba dos ametralladoras emplazadas en popa". De este modo, el escrito añade que "al percatarse de la aproximación de la patrullera de la Guardia Civil, procedió a tratar de recoger la boya con la bandera".
El principal objetivo de la patrullera de la Royal Navy era que los españoles no se acercaran y utilizando la megafonía advirtieron: "no pueden estar ustedes aquí, son aguas internacionales, están cortando nuestra proa, aléjense inmediatamente".
Mientras avisaban a la Guardia Civil, los británicos recogían apresuradamente la boya, donde la bandera española sobresalía un metro por encima. Los agentes españoles concluyeron en su informe que aunque no fueron testigos del uso de las ametralladoras, saben que estaban disparando contra la bandera española como blanco. Y es que también en ese instante empezaron a desmontar las armas que tenían en cubierta con el objetivo de evitar que se viese lo que estaban haciendo.