Los verdes tienen en España un apoyo residual, al menos en un partido que se defina como tal. Y por ello ya se está ultimando un nuevo partido a escala nacional que aune a todos los grupúsculos y que tenga la suficiente fuerza para buscar el voto de los desencantados con Zapatero en materia medioambiental.
El proyecto será un partido ecologista y de izquierdas, conocido popularmente como rojiverde, y estaría liderado por el diputado de ICV, el catalán Joan Herrera y el polémico director de Greenpeace España, Juan López de Uralde, cuyo último hito fue pasar 20 días en prisión tras colarse en la recepción de la Reina de Dinamarca durante la Cumbre del Clima de Copenhague.
Uralde es hasta ahora el más activo y ya ha anunciado su salto a la política por lo que ya anunció para agosto su salida de la dirección de la organización ecologista. Tal y como recoge El Confidencial, en ese momento dijo que "sólo y exclusivamente" estaría en un partido rojiverde.
El otro actor principal será Joan Herrera, actual diputado nacional de ICV. El catalán ya llevaría tiempo manteniendo conversaciones discretas con representantes políticos, culturales y de distintos movimientos sociales. Sin embargo, hasta ahora se ha mantenido en un segundo plano puesto que es candidato para la Generalidad.
El objetivo es trasladar a España el modelo francés y conseguir un 10 por ciento de los votos, porcentaje que los verdes manejan en varios países europeos. Además, buscan unir a todos los votantes de izquierdas que no comparten la política medioambiental del Gobierno.