Catalina Carboneras, agregada de Interior de la Embajada de España en Suiza estuvo presente, insólitamente, durante el registro efectuado en las oficinas de Arturo Fasana en Ginebra. Se trataba de una actuación solicitada por la Justicia española, dentro de las comisiones rogatorias del caso Gürtel.
Esta "presencia extraña" se ha desvelado gracias a la documentación remitida a España por las autoridades suizas, que descubrían que una representante de interior había estado presente en una actuación de carácter judicial, no gubernativo. Todo ello, sin tener la condición de policía judicial ni estar incluida en las comisiones rogatorias cursadas por Baltasar Garzón, que, sin embargo, sí pidió permiso a las autoridades del país helvético para que estuvieran presentes los funcionarios de Brigada de Blanqueo de Capitales.
En estos documentos no dejan constancia de quién instó la presencia de Catalina Carboneras, pero sí de que lo autorizó el fiscal suizo que dio luz verde a la comisión rogatoria, Sergio Mastroianni.
El Mundo ha consultado con magistrados de enlaxce y expertos en estas prácticas, quienes aseguran que "nunca" se han encontrado con agregado antes, calificando el hecho de "insólito" porque se trata de actos de carácter jurisdiccional. Por otro lado, Carboneras no ha querido hacer declaraciones sobre estos hechos porque "son asuntos profesionales reservados".
"Poned en esto una diligencia especial"
Pero además de que la agregada de Interior en la Embajada española en Suiza no sea ni magistrada ni funcionaria del Juzgado encargado de la investigación penal, y asistiese al registro, hay otros asuntos relevantes en este caso.
La Embajada suiza en Madrid advirtió a la Policía Federal de las "repercusiones políticas" del 'caso Gürtel' en España. Por su parte, la Embajada de Suiza en España tampoco pasó por alto la relevancia del caso, y el 4 de mayo de 2009 envió un correo electrónico a la Policía Federal del país helvético para que pusiera en una "diligencia especial" la tramitación de las comisiones rogatorias que se cursaran por parte de la Justicia española en relación con Gürtel.
El Mundo ha tenido acceso a una copia de este mensaje, y está firmado por François Voeffray por orden del embajador. Voeffray es el consejero de la representación diplomática suiza para asuntos jurídicos.
Desde la Embajada en Madrid se llama la atención de estas autoridades policiales en relación a "un gran affaire de presunta corrupción política" que "podría tener ramificaciones en Suiza" y que lleva semanas ocupando los titulares de la prensa española.
"La investigación preliminar de este affaire ha sido dirigida por el juez Baltasar Garzón de la Audiencia Nacional e implica a varias personalidades de primer nivel del Partido Popular (PP), el principal partido de la oposición" asegura el escrito.
"Según el juez Garzón, una red de corrupción, dirigida por un tal Francisco Correa, ha dado dinero y diversos bienes en especie (coches, trajes, etc.) a dirigentes del PP a cambio de la adjudicación de contratos y concesiones", añade.
"Cuando la demanda de ayuda sea presentada, somos de la opinión de que debe ser tratada con una diligencia especial , siendo conscientes de las repercusiones mediáticas y políticas en España", señala.