Según informa El Mundo este jueves, un importante número de agentes de la Guardia Civil están bastante molestos con el hecho de que la sentencia que absuelve a Otegi por el mitin de Anoeta sugiera que no ha sido condenado por la falta de pruebas entregadas por el Instituto Armado.
De hecho, los guardias civiles han denunciado ante sus superiores que ni el juez ni el fiscal que instruyeron el juicio solicitaron informes periciales de inteligencia a los investigadores sobre el papel de Otegi y otros dirigentes proetarras durante el acto celebrado en 2004.
Los agentes infiltrados en el mitin se limitaron a realizar dos requerimientos judiciales puntules sobre datos concretos. Uno de ellos pedía a los guardias que identificaran la identidad de los numerosos etarras de los que se mostraron retratos en una pantalla gigante y que aclarasen la pertenencia de los imputados a los órganos de la organización de la formación proetarra.
Sin embargo, nadie les pidió que buscasen las pruebas que pudieran demostrar que Otegi, Permach y Álvarez habían tenido participación directa en la organización del acto de Anoeta.
Por ello, los guardias civiles han manifestado extraoficialmente, según el diario de Unidad Editorial, su enfado porque la sentencia sugiera que han sido absueltos por la falta de pruebas entregadas por el Instituto Armado.
En el juicio, los guardias civiles que estuvieron en el mitin afirmaron que era imposible que los tres líderes proetarras no estuviesen al tanto de los contenidos del acto. Sin embargo, la Sala dijo que los agentes no explicaron esta afirmación lo suficiente "ni tampoco aportaron qué dato externo les permitía llegar a mantener tal acusación".