LD (Pablo Montesinos) La ex concejal del PSOE en Guecho Gotzone Mora ya no vive en el País Vasco. Sus hijos también hace tiempo que dejaron su tierra. Ella lo hizo por trabajo, de hecho todavía regresa los fines de semana -su marido “sigue resistiendo”- mientras que sus dos hijos ya no están ni tan si quiera empadronados en el municipio vizcaíno.
“El nacionalismo nos ha ido expulsando de mala manera a las personas que no pensamos como ellos, sometiéndonos a todo tipo de atropellos”, asegura, en declaraciones a Libertad Digital. La ex dirigente socialista denuncia que lo que se vive en el País Vasco “no es de democracia” ya que hay un sector, los denominados “constitucionalistas”, que viven “cada día peor” provocando el exilio de cientos de familias. En Guecho, por ejemplo, “la presión es cada día más fuerte y mucha gente acaba tirando la toalla y marchándose”.
Para Gotzone Mora el nacionalismo vasco y la banda terrorista ETA se han encargado de romper “a multitud de familias” cuyos miembros viven “en una parte diferente de España”.
Una familia separada por la distancia
Su caso no es una excepción. Su marido sigue viviendo en el País Vasco, a dónde ella acude la mayoría de fines de semana desde Valencia, donde trabaja al servicio del Ejecutivo de Camps. Sus dos hijos ya no pisan su tierra: “les han maltratado por ser precisamente mis hijos, no han parado hasta echarles”.
“Yo sigo empadronada en Guecho y pedí conservar el voto allí pero eso me ha resultado enormemente complicado” ya que “todas las leyes nos plantean muchas problemáticas por asuntos sanitarios o escolares”. Por ello, Gotzone Mora también se ha adherido a la iniciativa de César Velasco Arsuaga y DENAES para que los exiliados del País Vasco y Navarra puedan votar en los lugares que se vieron obligados a abandonar.
Amparándose en la aplicación de la Ley de Memoria Histórica, que permite que los hijos y nietos de exiliados de España durante la guerra civil y el franquismo puedan optar ahora a la nacionalidad española, Mora cree que “nosotros que vivimos en el mismo territorio tenemos el mismo derecho a recuperar el voto, a votar en nuestro lugar de origen”. “No estamos fuera porque queramos sino porque las circunstancias nos han obligado”, recuerda.
Por ello, insta al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y al PSOE ha secundar esta iniciativa. “Estamos como los judíos errantes transitando por otros territorios que nos acogen pero a 100 kilómetro de nuestra casa”, añade. Eso sí, admite que no se fía del partido en el que militó: “no quiero ni pensar que Patxi López pueda convertirse en Lehendakari”.
Las víctimas de ETA se adhieren
Mientras tanto, las adhesiones siguen multiplicándose. Junto a Gotzone Mora, dirigentes del PP vasco tan importantes como Regina Otaola o Santiago Abascal ya han anunciado su apoyo a la campaña “Un exiliado, un voto”. Las víctimas del terrorismo también han mostrado su absoluto respaldo y asociaciones como Voces Contra el Terrorismo y Verde Esperanza también se han sumado.
De no apoyar la iniciativa, recalcó Francisco José Alcaraz en declaraciones a Libertad Digital, se estaría “rentabilizando la muerte y la persecución que lleva a cabo ETA”. “He tenido la posibilidad de compartir experiencias con amenazados por ETA y sé que hay algunas personas que abandonan porque ya no pueden más”, sentenció.