El presidente del Gobierno anunció ayer miércoles la creación de una comisión para negociar con los demás grupos políticos un acuerdo económico que debería cerrarse en un plazo de dos meses y versar sobre cuatro temas: medidas para mejorar la competitividad de la economía española y fomentar la creación de empleo; política industrial para impulsar la renovación del modelo productivo; cumplimiento del plan de consolidación fiscal para asegurar la reducción del déficit público y la reforma del sistema financiero (estabilidad, morosidad y acceso al crédito).
Al frente de esta comisión negociadora colocó a la vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Elena Salgado, y a los ministros de Fomento, José Blanco, e Industria, Miguel Sebastián. Éstos se reunieron entre ellos este jueves por la mañana en una primera toma de contacto para abordar el calendario y el método de la comisión negociadora encargada por Zapatero. El lugar elegido fue la zona que el Ejecutivo tiene reservada en el Palacio del Congreso pero a su término no facilitaron ninguna información.
Precisamente, en ese mismo escenario, el portavoz del PSOE en la Cámara Baja, José Antonio Alonso, se reunía en las instalaciones de la Carrera de San Jerónimo con los representantes del PNV, ERC e IU-ICV –ayer miércoles lo hizo con CiU– dentro de la ronda de contactos que mantiene con los grupos políticos. Una ronda en la que comenzó a trabajar ya la semana pasada y que sirve para buscar acuerdo con los partidos contra la crisis. Exactamente lo mismo objetivos que la anunciada por Zapatero.
El encuentro de Alonso con el portavoz del PNV, Josu Erkoreka, sirvió para comprobar que ambas comisiones no sólo tienen los mismos objetivos, sino que no existe ningún tipo de coordinación entre ellas. Y es que durante la mañana, el equipo de Salgado intentó de manera constante ponerse en contacto con Erkoreka, algo que no lograron porque el dirigente peneuvista tenía el móvil apagado. ¿La razón? Estaba reunido con Alonso. Es decir, el equipo de Salgado pasó unas horas intentando localizar a un dirigente político que se encontraba en las instalaciones del Congreso asignadas al PSOE, pero no tenían conocimiento de ello.
Cuenta de ella dio el propio Erkoreca ante los periodistas a su salida del encuentro que mantuvo por el portavoz parlamentario del PSOE: "No les voy a ocultar que he cruzado llamadas con la vicepresidente segunda, pero han resultado frustradas ambas, porque cuando ella me ha llamado yo estaba reunido y cuando le he devuelto la llamada era ella la que estaba reunida".
Tras la polémica generada por la falta de coordinación entre las comisiones del Gobierno y la del PSOE, y la disputa de ambas por Josu Erkoreka, el presidente del Gobierno decidió convocar a media tarde de este jueves en el Complejo de La Moncloa a los tres integrantes de la comisión encargada de negociar acuerdos económicos con la oposición: Salgado, Blanco y Sebastián.El propio Alonso tuvo que salir en sede parlamentaria en defensa de su ronda de contactos paralela, que consideró "indispensable" y "complementaria", porque, según subrayó, el Legislativo tiene su propia función, que es la de traducir en leyes los acuerdos que se puedan alcanzar.
Los encuentros con Alonso los había dejado en evidencia minutos antes el portavoz de ERC Joan Ridao, que dejó entrever que su entrevista con Alonso sólo había servido para saber más o menos cuándo sería su entrevista con Salgado: "No tengo ningún dato, ni tampoco el señor Alonso me ha podrido precisar ni cuándo ni dónde, aunque sí que me ha especificado que el peso de la negociación corresponde a la vicepresidenta económica y, por tanto, supongo que será la semana que viene en el ministerio de Economía", dijo.