L D (EFE) El PSOE colocará en los próximos días 3.500 vallas publicitarias, 8.000 carteles para cabinas telefónicas y otros 3.000 para marquesinas y medios de transporte para convencer a los ciudadanos de los "motivos para creer" en el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, frente a los "motivos para temer" al candidato del PP, Mariano Rajoy.
Este es el eje de la precampaña gráfica presentada este lunes en la sede socialista de Ferraz por el coordinador de campaña del PSOE, José Blanco, que aseguró que su partido hará una campaña "positiva" y "optimista".
"Motivos para creer" es el eslogan de precampaña del PSOE y aparecerá en todos los carteles, acompañado por otros lemas, junto al logo del partido y a diferentes imágenes de Zapatero, sonriente, pensativo, en actitud triunfadora en diversos mítines, y siempre sin corbata.
"Por todo lo que merece la pena", "comprometidos con la igualdad", "Vivimos juntos, decidimos juntos", "No es lo mismo", "Porque lo estamos consiguiendo", "Somos más", "Soñar con los pies en la tierra", "Por todo lo logrado", "Por el pleno empleo", "Porque no todo está hecho", "La octava potencia económica, los primeros en derechos sociales", "Podemos llegar tan lejos como queramos" y "Ahora que avanzamos, por qué retroceder" son los diferentes mensajes que el PSOE quiere transmitir a los ciudadanos en la precampaña, es decir, antes de empezar a pedir directamente su voto.
Una vez que empiece la campaña electoral, los socialistas colocarán además banderolas en 20.000 farolas.
El secretario de Organización del PSOE aseguró además que la campaña socialista en radio, televisión e Internet "dará que hablar" y subrayó que el partido sabrá aprovechar el nuevo formato de anuncios electorales –microespacios de 30 segundos mezclados con la publicidad– que se pondrá en marcha en las televisiones públicas.
Blanco incidió en que la campaña socialista hará hincapié "en la positividad" de Zapatero frente a "la negatividad de Rajoy" y presentará un mensaje de confianza, de progreso y de valores de paz y solidaridad frente al discurso del PP, que consideró "catastrofista" y "nacido de la indigestión de la derrota" electoral de 2004.
El dirigente socialista pintó al PP como el partido que se ha opuesto a la Ley de Igualdad y a que cada uno pueda casarse con quien quiera, "que los sábados por la tarde se manifiesta del brazo de los obispos contra los derechos civiles" , que se opone a la investigación con células madre, que prefiere "la guerra preventiva a la Alianza de Civilizaciones" y que practica "purgas ideológicas" entre los médicos, en referencia al caso del hospital Severo Ochoa de Leganés.
Así, Blanco dijo que le produciría escalofríos un gobierno del PP "con Acebes, con Pizarro gestionando las cuentas públicas, con Lamela de ministro de Sanidad y con Aznar moviendo los hilos desde la oscuridad. Defendió que Zapatero tiene un proyecto para la España de la segunda mitad del siglo XXI, mientras que a Rajoy "el reloj se le paró en 2004" y pretende que toda la sociedad española "dé marcha atrás".
Dos han sido el objetivo de sus críticas: la Iglesia y el Partido Popular. Ha hecho una advertencia a los católicos afirmando que "hemos sido muy claros, nada será igual después del 9 de marzo".
Añadió que "hay una situación concreta que es el acuerdo entre la Iglesia y el Estado que debe replantearse porque la jerarquía eclesiástica la está replanteando todos los días buscando la confrontación con el Gobierno legitimo de España". Por ello, avisó de que se podría modificar de nuevo la financiación de la Iglesia, por lo que "es hora de pasar de las palabras a los hechos" debido a que "la jerarquía eclesiástica viene diciendo desde hace mucho tiempo que hay que caminar hacia la autofinanciación" y deberán darse "pasos definitivos en esa dirección".