El problema del PSOE en Madrid no tiene visos de que acabe. El País ya tiene su apuesta para enfrentarse a Aguirre y ésta no pasa por Tomás Gómez sino por Trinidad Jiménez. Rodríguez Zapatero estaría sopesando seriamente impulsar su candidatura y enviar a la sombra al actual líder del PSM, al que curiosamente él mismo aupó.
La guerra abierta en el PSOE en Madrid sigue abierta y más con la intención de Zapatero de aupar a la actual ministra de Sanidad como candidata a la comunidad. Sin embargo, tiene un problema y es que Tomás Gómez no está por la labor de dejar paso a su compañera de partido.
Según cuenta el diario de Prisa, las encuestas del partido avalan la candidatura de Trinidad Jiménez, a pesar de que ya perdió estrepitosamente en las elecciones para el Ayuntamiento de Madrid contra Ruiz Gallardón.
Y es que la Ejecutiva Federal se ha propuesto Madrid como gran objetivo para las elecciones para 2011 y creen que la mayoría absoluta conseguida por Aguirre puede caer el año que viene. Mientras tanto, el secretario de Estado de Deportes, Jaime Lissavetzky, sería el nombre preferido para intentar luchar contra Gallardón en la alcaldía.
Por su parte, La Gaceta informa de una nueva maniobra del PSOE que tiene como objetivo principal restar votos al PP y frenar el ascenso de UPyD de cara a las próximas elecciones generales. Para ello, los socialistas quieren que el presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, se presente a las elecciones.
El PSOE, socio del Partido Regionalista Cántabro, ve la posibilidad de que se presenten como una gran noticia puesto que podría restar algún diputado al Partido Popular. Hoy en día, Cantabria dispone de cinco escaños, de los que tres son para el PP y dos para el PSOE. Con la irrupción de la formación de Revilla, los socialistas buscan que los populares pudiesen perder uno o incluso dos diputados y que UPyD no consiguiese el escaño al que opta.