Uno de los socialistas que este sábado se ha referido a la imputación de Diego López Garrido ha sido Alfredo Pérez Rubalcaba, que en declaraciones desde Algeciras, ha asegurado que está "convencido" de que todo "quedará en nada". "Confío plenamente en López Garrido, he trabajado con él dos años", apuntó.
Mientras, el secretario de Economía del PSOE y secretario de Estado de la Seguridad Social, Octavio Granado, en declaraciones a los periodistas desde Mallorca, habló de fechas. Allí indicó que "la renuncia se planteó en un momento" pero se registró "meses más tarde", en alusión a la pertenencia de Garrido a la Fundación Alternativas, vinculada al PSOE y a la que su departamento otorgó subvenciones por valor de 78.000 euros.
También negó que esta imputación pueda influir a la próxima presidencia española de la UE. Además, expresó que este tema "no tiene más allá de una importancia reducida" por lo que confió en que se resuelva "rápidamente".
Granado señaló que él mismo es afiliado a Organizaciones No Gubernamentales (ONG) con las que la Seguridad Social "tiene relaciones" por lo que remarcó que no debe "dar la sensación que es lo mismo" tener una participación en una ONG con gozar de una "actividad de lucro indebido".
López Aguilar culpa a la derecha de la querella
Otro socialista que se ha apresurado a hablar para defender a Garrido ha sido el secretario general del PSC-PSOE y presidente de los socialistas españoles en el Parlamento europeo, Juan Fernando López Aguilar. El eurodiputado dijo tener, "fuera de toda duda, plena confianza en la integridad" del secretario de Estado para la Unión Europea.
Así se posicionó el líder socialista en rueda de prensa posterior a la reunión de la comisión ejecutiva del PSC-PSOE que tuvo lugar en Tenerife. El eurodiputado insistió en que tiene "plena confianza" en que la imputación de López Garrido "no tendrá ningún recorrido" basándose en el conocimiento de ese asunto que tiene "a través de los medios de comunicación". Desde esta premisa garantizó que tampoco tendrá "ningún efecto" sobre la agenda del PSOE de cara a la próxima presidencia de España de la UE.
El también ex ministro de Justicia consideró además que "hay todo un conjunto de organizaciones en la constelación de la derecha y de la extrema derecha especializadas en la interposición de querellas". Desde esta premisa opinó que "en este país es muy fácil interponer una querella". "No tengo ninguna preocupación", zanjó.