El secretario general del PP andaluz, Antonio Sanz, ha asegurado que el vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, "tiene las horas contadas" y "acabará siendo cesado" porque "en cualquier democracia normal, ya habría sido cesado".
Sanz, que ha intervenido en la Escuela de Verano del PP-A en Torremolinos (Málaga), ha subrayado que "en una democracia no se puede mantener no sólo a un miembro del Gobierno que miente al Congreso, sino que se prueba que ha actuado presuntamente de manera irregular", en alusión a las subvenciones a la empresa de su hija.
Ha explicado que el PP decidió retirar la querella contra Chaves "para ampliarla con la documentación que cinco meses después hemos recibido porque nos la negaba el PSOE".
Para Sanz, "está claro que Chaves ha mentido en el Congreso de los Diputados y ha engañado a los ciudadanos diciendo que su hija no había participado en la tramitación del expediente" y, "después de haberse comprobado con un documento firmado que su hija fue la que aceptó la subvención, Chaves debería dimitir de manera inmediata".
El dirigente del PP-A se ha mostrado "convencido" de que en el PSOE "ya se cuentan con los dedos de una mano los que ponen la mano en el fuego por Chaves, porque cada día son más las evidencias y las pruebas".
El PP está preparando una querella porque "pueden existir situaciones y hechos de lo que puede haber sido la comisión de una presunta prevaricación, tráfico de influencias y, en la vía contencioso-administrativa, un incumplimiento grave de la Ley de Incompatibilidades". "Si el PSOE no rectifica, estamos convencidos de que la corrupción puede terminar siendo su puntilla en la Junta, como lo fue en el Gobierno de Felipe González", ha añadido.
El PSOE acusa a Arenas de mantener "una persecución"
Por su parte, el secretario de Organización del PSOE-A, Rafael Velasco, criticó al presidente del PP andaluz, Javier Arenas, por mantener, dijo, "una persecución, una cacería", contra el vicepresidente tercero del Gobierno y ex responsable de la Junta, Manuel Chaves, actitud que tachó de "auténtica vergüenza en democracia".
Velasco hacía referencia así a la decisión de los populares de presentar una querella, para luego retirarla, ante el Tribunal Supremo contra Chaves por la subvención concedida a la empresa Matsa, para la que trabaja su hija, cuando era presidente de la Junta de Andalucía.