La información firmada por Fernando Lázaro y Manuel Marraco señala que en un principio el equipo español de la investigación –había uno francés también– estaba encabezado por el responsable de la Unidad Central de Inteligencia, el comisario José C., el primero que gracias a sus trabajos previos se centró en Carlos G., el que posteriormente le reemplazó, como uno de los posibles responsables del chivatazo.
Además, agrega que el relevo sorprendió a muchos de la cúpula policial de la lucha antiterrorista sobre todo porque en un informe José C. había señalado al que sería su sucesor al frente de la investigación como un hombre contrario a la desarticulación de la red de extorsión en pleno "proceso de paz".
La versión falsa de Rubalcaba
Además de esto, El Mundo revela que el ministro Rubalcaba dio una versión falsa en el Congreso cuando dijo que había condecorado al policía encargado por la investigación del chivatazo por sus trabajos relacionados con el robo de droga en la Jefatura Superior de Policía de Sevilla. Fernando Lázaro recuerda que el caso se conoció en julio de 2008 y que quince meses después la unidad de Carlos G. detuvo a varios policías supuestamente vinculados al robo.
Sin embargo, el ministro del Interior olvida que la medalla con distintivo rojo a Carlos G. –que supuso un aumento del sueldo en un 15%– fue otorgada en 2006, es decir dos años antes de que se conociera el robo de la droga.