L D (Agencias) El PNV defiende en su documento del "Aberri Eguna", que se celebra este domingo, que el País Vasco "es una nación con todos los derechos", y reivindica el derecho de autodeterminación e independencia del pueblo vasco, frente al proyecto del "unionismo" -en alusión al PP y al PSOE- que pretende crear "una España uniforme".
Además, asegura que sabrá "esperar su momento", que trabajará en la oposición "sin perder la unidad y la centralidad" y llama a "los decepcionados" que votaron a Patxi López para que recuerden que "mintió" al propugnar la transversalidad.
En el manifiesto, la formación proclama el País Vasco "es una nación con todos los derechos", y es el "testimonio vivo" de "un pueblo con identidad propia" en el conjunto de Europa, "depositario de un patrimonio histórico, social y cultural propio y asentado geográficamente en siete territorios ubicados en dos Estados a ambos lados de los Pirineos". "Nuestro objetivo político es consolidar un marco político y jurídico en el que el sujeto político del pueblo vasco en su integridad tenga definido el derecho a decidir su futuro: el reconocimiento del derecho de autodeterminación y los procedimientos que garanticen el respeto a las decisiones de la ciudadanía vasca", añade
Según asegura el PNV, "el objetivo de la construcción nacional y social ha actuado siempre de estímulo y guía de actuación en su centenaria historia", y subraya que, en las elecciones del pasado 1 de marzo, los resultados fueron "inapelables", porque ganó "con nitidez".
A su juicio, ha existido "una pugna electoral estratégica", que "arrancó el 2001, a la que los partidos constitucionalistas, desde la primacía de la legalidad, han incorporado en el tiempo 'perfeccionamientos' al proyecto político compartido, alterando las reglas del juego democrático e impidiendo que toda la sociedad vasca esté representada en el Parlamento vasco", en alusión a Batasuna-ETA.
Destaca que estos partidos "comparten la misión de uniformizar el proyecto de España". Por ello, asevera, "ante una nación española que no admite otra realidad que la suya propia", que "los sentidos de pertenencia nacional no se imponen", que "los sentimientos, o se respetan, arbitrando para ello un marco recíproco de garantías de respeto y desarrollo en igualdad de condiciones, o la imposición de una de ellas, se constituye en fuente permanente de conflictos".
El documento señala que partidos "que divergen en casi todo, tienen un eje común de actuación sobre los cuatro territorios del sur del País Vasco: el proyecto político del unionismo, el proyecto de la España uniforme, liquidando los conceptos de la plurinacionalidad y el respeto al principio democrático como guías de actuación de un sistema democrático de convivencia entre naciones".
"Las prisas socialistas"
El PNV subraya que, en el origen del actual acuerdo PSE-PP "está el no haber hecho una lectura correcta de los resultados electorales, y eso se pagará, lo pagará la sociedad vasca".
En esta línea, asegura que "ha triunfado el corto plazo sobre la visión de país". "Las prisas por hacerse con el Gobierno han hecho que no les preocupara su falta de coherencia. ¿Qué fórmula van a utilizar para afrontar los verdaderos retos de la sociedad vasca, para salir de la crisis?, ¿las recetas que propone el PSOE y que no están dando resultado, o las que pretende el PP, que son radicalmente diferentes?", pregunta.
También les piden que aclaren si "van a abordar la reforma estatutaria como ha hecho el PSOE en todas las autonomías o van a considerar que eso rompe España, como ha dicho el PP en todas las ocasiones y como parece ya intuirse en el texto de su acuerdo".
"¿Cómo se van a situar en el eje ideológico para dar una mínima coherencia a un Gobierno sostenido por un partido que no ha terminado de abandonar el espacio de la extrema derecha? ¿Qué van a hacer con el euskera: lo que prometía Patxi López en aquella reunión tranquilizadora en el Palacio de Miramar o lo que acaba de declarar Basagoiti y que rompe con un amplio consenso?", señala.
También se pregunta "por qué les ha resultado tan fácil ponerse de acuerdo para conseguir el poder sin necesidad de ponerse de acuerdo en ninguna cuestión programática".
No se mantendrán "callados"
La formación asevera que no estarán "subordinados al juego táctico de Madrid", y que no se mantendrán "callados". "Tenemos el derecho y la obligación de advertir que, con un Gobierno formado por PSE y PP, la garantía de mantener una sociedad diferenciada está seriamente amenazada", señala.
Además, denuncia que quieren que estén "subordinados al juego táctico de Madrid, a los intereses de Zapatero y Rajoy, pero también políticamente dependientes a un marco de decisión del que volveremos a ser una parte inofensiva".
"Nos dirigimos ahora a los decepcionados, a quienes votaron a Patxi López porque les prometió el cambio, el no frentismo. Nos dirigimos a quienes creyeron a un PSE que les prometió un Gobierno integrador. Todos esos saben que los socialistas han engañado a la sociedad, que han apelado a la transversalidad durante años y durante la campaña y han practicado el frentismo en cuanto se cerraron las urnas, en cuanto arreciaron los gritos de 'Patxi Lehendakari'", manifiesta.
El PNV subraya que realizó una oferta de Gobierno a los socialistas y recuerda que PSE se negó, por lo que espera que, "en adelante, no se atreverán a presumir de capacidad de integración sin que se les ponga la cara roja de vergüenza".
Evocan a Sabino Arana
La formación recuerda la frase de su fundador, Sabino Arana, sobre su proyecto: 'La patria de los vascos es Euskadi. Nuestra única patria es Euskadi'. "No vamos a dejar de ser en la oposición lo que fuimos en el Gobierno. La sociedad vasca va a comprobar una vez más nuestro sentido de responsabilidad, nuestro compromiso con este pueblo y también nuestra determinación y exigencia. Y pronto nos reafirmará su confianza para seguir liderando este país", asegura.
Además, critica que "el PSE va a construir su mandato sobre la mentira, la debilidad, y la dependencia: dependencia de Madrid y dependencia del PP". "Ha traicionado lo que ha prometido, y eso no se lo va a perdonar la sociedad vasca", indica.
A su juicio, "estar en la oposición, y sobre todo, después de haber ganado por goleada unas elecciones, es una situación incomparablemente menos grave" que la de que sufrieron los jeltzales exiliados. "Vamos a saber gestionar esta situación con inteligencia y altura de miras", señala, para rechazar que vayan a hacer "una especie de oposición irresponsable, entendida como un contrapoder".