El pasado sábado, Francisco Camps protagonizó un acto en Valencia en el que se autoproclamó candidato del PP a las próximas elecciones autonómicas. “Hoy he hablado con Mariano -Rajoy-, conscientes los dos de que él será el presidente del Gobierno y yo seré a partir de 2011 quien siga dirigiendo los destinos de la Comunidad Valenciana”, proclamó el barón regional.
Sin embargo, escuchándole no había nadie de la dirección nacional de la formación, ni tan siquiera los primeros espadas que representan a la comunidad en las Cortes regionales: Esteban González Pons y Federico Trillo.
Siete días después, Luisa Fernanda Rudi ha sido proclamada oficialmente, y con el consentimiento de Génova, candidata del partido a presidir el Gobierno de Aragón. No ha faltado nadie. En las gradas, los tres vicesecretarios, Ana Mato, Javier Arenas y el citado González Pons; la presidenta del Parlamento vasco, Arantza Quiroga; los portavoces de las Cámaras, Soraya Sáenz de Santamaría y Pío García Escudero; así como destacados diputados, senadores y europarlamentarios.
Y capitaneando tan nutrida delegación el líder del partido, Mariano Rajoy, quien no ahorró elogios hacia “su amiga” Luisa. “Hemos venido aquí, y que lo sepa todo el mundo, a apoyarte. Aquí está la gran mayoría del Comité Ejecutivo nacional, muchos militantes de toda España, y están aquí porque quieren”, proclamó el líder popular.
Sin embargo, Rajoy fue un poco más allá, y sentenció: “están aquí porque les da la gana, que es lo mejor que te puede ocurrir en la vida política”. Entonces, todo el mundo pensó casi al instante en Camps. Fue un “órdago envenenado en toda regla”, sentenció un miembro del Comité de Dirección, en conversación informal con Libertad Digital.
Una interpretación compartida por muchos en el cuartel general de los populares, cuyo gabinete de prensa lleva toda la semana vendiendo con insistencia lo importante del acto de Zaragoza, “al que va acudir toda la cúpula”. “Es una patadita más, otra, para que se dé cuenta -Camps- que está sólo y que ya sólo le queda dimitir”, sentencia otro dirigente popular.
¿Y qué pasa con la plaza de toros de Valencia?
La pregunta ahora es qué hará Rajoy con el mega-acto que el presidente valenciano está preparando para el próximo fin de semana de julio en la plaza de toros de la ciudad del Turia. Allí, y según las fuentes consultadas, Camps insistirá en su candidatura, y quiere que el jefe esté allí para respaldarle.
Oficialmente, el líder de los populares no tiene previsto “ningún acto en Valencia” para esas fechas, y desde su equipo se insiste en que “no acude a todos los actos regionales del partido”. Oficiosamente, eso sí, ven difícil que Rajoy no asista “si Camps sale ante los medios de comunicación y se lo pide formalmente”.
Dicho esto, son mayorías quienes creen, o quieren creer, que Camps ya no estará al frente de sus responsabilidades por esas fechas.