El juez instructor, Thomas Burgess, analiza desde el pasado abril los alegatos de la defensa de De Juana en contra de su sentencia del pasado 10 de marzo. En ella, el juez consideró que el delito de enaltecimiento del terrorismo que le imputa la Justicia española es susceptible de extradición, en virtud de la ley británica sobre terrorismo de 2006.
La defensa indicó, tras conocer aquel fallo, que en España se está dando un proceso judicial viciado en el que se prejuzga al preso de ETA y, por lo tanto, se violan sus derechos fundamentales. Además, los abogados de De Juana piden al juez que se tenga en consideración "el impacto del aislamiento y la detención incomunicada" que sufrió durante dieciocho de sus veintiún años de cárcel en España.
Esos argumentos forman la base del rechazo de la defensa a la extradición del ex preso etarra, quien permanece en Belfast en libertad vigilada desde el pasado 17 de noviembre.
La defensa dijo que "existe un alto riesgo" de que el estado de "depresión y estrés postraumático" de su cliente empeore si regresa a España, porque no descarta comenzar una huelga de hambre que podría provocar su "muerte". Su supuesto delicado estado de salud, según el letrado, es fruto de los malos tratos y de los largos periodos de aislamiento sufridos durante parte del tiempo que pasó en prisión en España por el asesinato de 25 personas.
Sus abogados también tachan de "defectuosa", "contradictoria" y "demasiado vaga" la orden europea de detención cursada por la Audiencia Nacional española para la detención del ex jefe del grupo Madrid de ETA.
La defensa sostiene que la orden se basaba en informaciones periodísticas que reproducían las palabras de una carta leída por una mujer en el homenaje que se rindió en agosto de 2008 en San Sebastián a De Juana –ausente de ese acto– tras su salida de la cárcel, donde cumplió 21 de los 3.000 años de prisión a que fue condenado por 25 asesinatos cometidos como terrorista de ETA.
La Audiencia Nacional cree que puede haber delito en el final de la misiva, atribuida al excarcelado, que reza: "Sólo quiero recordar las palabras de un gran hombre y por suerte amigo de este pueblo: '¡Aurrera Bolie!' ('Adelante la pelota', en lengua vasca)", expresión con la que el veterano dirigente de ETA Domingo Iturbe Abasolo, alias "Txomin", solía terminar sus discursos. El juez Eloy Velasco, de la Audiencia Nacional, pidió la entrega de De Juana, a fin de poderle interrogar sobre la carta.
Con independencia del veredicto de Belfast, el proceso podría prolongarse ya que, una vez que Burgess se pronuncie sobre las eventuales alegaciones, el caso podría pasar al Tribunal de Apelaciones de Belfast y, posteriormente, al Tribunal Supremo en Londres, máxima instancia judicial del Reino Unido.