Según confirmaron fuentes judiciales norirlandesas, la vista ha sido fijada a instancias de la Fiscalía, que representa a la Audiencia Nacional, después de que el pasado 29 de abril los magistrados del Alto Tribunal fuesen informados de que se ignora el paradero del asesino de 25 personas y ex jefe del grupo Madrid de ETA.
De Juana se presentó el pasado 25 de marzo por última vez en la comisaría de Belfast en la que debía comparecer en cumplimiento de la condicional otorgada en noviembre de 2008. Por entonces, habían pasado apenas tres semanas desde que el magistrado norirlandés que presidía el proceso de su entrega a España rechazase los argumentos de la defensa, basados en el riesgo que regresar supondría para su salud.
Fuentes judiciales explicaron que, aunque la ausencia del ex preso implica automáticamente revocar los términos de su libertad, no será hasta esta vista del 14 de mayo cuando se concretará la fórmula. A partir de las 9.30 horas, hora local, el juez que preside la apelación comparecerá en las Reales Cortes de Justicia del Ulster para evaluar con el equipo legal de De Juana y la Fiscalía la fase que la posible fuga supone en el proceso.
El caso había sido trasladado ya desde el Complejo Judicial de Laganside, en la capital norirlandesa, donde hasta ahora se habían celebrado las cinco vistas de la extradición. Sin embargo, la desaparición abre un nuevo estadio legal, puesto que, aparte de la revisión de la condicional, implica una orden de busca y captura contra el reo.
Vista imprevista
En principio, las partes no preveían verse hasta finales de junio, cuando había quedado fijada la audiencia para evaluar el recurso presentado contra la decisión del juez Tom Burgess de acceder a la demanda de su colega en la Audiencia Nacional, Eloy Velasco. Sin embargo, la falta de De Juana ha llevado a reconfigurar calendarios, empezando por la vista de ayer martes, en la que se dio a conocer oficialmente a las autoridades judiciales que el ex preso está en paradero desconocido.
Fuentes judiciales confirmaron, no obstante, que hasta su reciente desaparición De Juana había venido respetando las condiciones impuestas por el juez, entre las que figuraba, además de la obligación de personarse en la sede policial de Grovesnor Road, en la capital del Ulster, un toque de queda, estar en la dirección que había dejado como su residencia cada vez que la policía se lo reclamase y la prohibición de abandonar el país. Consultados acerca del cumplimiento de las condiciones, personal de la comisaría subrayó que la información es privada, si bien reconocieron que había habido cambios en las últimas semanas.
Así, tampoco De Juana se ha pasado por los dos cafés en los que había recibido autorización para trabajar y cuyas señas había dejado también para ser localizado. Un dato que, sumado a la ausencia en el entorno de su vivienda, ha llevado a las autoridades a elucubrar con que ha abandonado Reino Unido, a pesar de que ya en noviembre de 2008 se le había retirado el pasaporte.
La decisión del ex preso de ETA podría influir en el proceso puesto que, hasta ahora, sus abogados habían reivindicado su disposición a colaborar, probada con su propia entrega voluntaria. De hecho, la Fiscalía había recomendado que no se le concediera la condicional y, aunque el juez español Eloy Velasco ya ha dejado claro que no admitirá la condicional, el juez Tom Burgess no había considerado que hubiese riesgo de fuga.
Argumentos
Durante los 16 meses de proceso, la defensa había insistido en que los antecedentes habían pesado en la decisión de Velasco. Pero el intercambio de información al que se procedió a lo largo de este tiempo convencieron al juez de que "no hay evidencias" que sugieran que las autoridades españolas buscarían más pruebas contra De Juana que las contenidas en la orden europea de detención (OED), o de que no vaya a contar con un "juicio justo".
Para la Audiencia Nacional, la frase "Aurrera bolie" (Adelante la pelota), leída supuestamente en nombre de De Juana en agosto de 2008 en un acto de homenaje en San Sebastián, representa una ofensa de enaltecimiento del terrorismo, por invocar el lema que el fallecido dirigente etarra Domingo Iturbe Txomin empleaba para apelar al mantenimiento del terrorismo para lograr la independencia del País Vasco.
Pero el juez consideró que no le compete al tribunal norirlandés determinar si hay los indicios suficientes para la imputación, aunque, en todo caso, descartó que por parte de España pueda existir "abuso de poder". Además, aprovechó para subrayar que De Juana podría haber haber defendido él mismo la "fragilidad" de los cargos presentados en su contra, de haber comparecido como se le había requerido en Madrid.
No obstante, el principal argumento de la defensa será el de una salud vulnerable como consecuencia de los supuestos malos tratos sufridos en sus 21 años en la cárcel, 18 de los cuales correspondieron a los 3.000 a los que había sido condenado por 25 asesinatos durante su pertenencia a la banda. Si es extraditado, De Juana podría volver a ponerse en huelga de hambre, con riesgo de muerte, como ya había procedido cuando había sido acusado por artículos considerados amenazantes.