Urrusolo está siendo juzgado por un triple asesinato por el que el fiscal Carlos Bautista le pide 128 años de cárcel. Urrusolo ha hecho estas afirmaciones a preguntas de su abogado defensor acerca de si ha abandonado la banda terrorista y ha escrito cartas desde la cárcel abogando por el fin de la violencia. En este sentido, ha recordado que él abandonó ETA en 1994 y, desde entonces, se ha "posicionado" a favor de que ETA abandone la lucha armada.
El etarra se sienta en el banquillo de los acusados por el envío de un paquete bomba en 1991 al Ministerio de Justicia que fue rechazado y que finalmente acabó con la vida del oficial de la Policía Luis Claraco López, el subinspector Pedro Domínguez Pérez y el oficial de Policía José Luis Jiménez Barrero, que intentaban desactivarlo.
Urrusolo ha asegurado no recordar si era suya la agenda que le incautaron al etarra Fernando Díaz Torres con los datos del atentado. "Puede ser, pero no me acuerdo", ha contestado a sucesivas preguntas del representante del Ministerio Público.