El vicepresidente primero del Gobierno ya tiene sobre su mesa una serie de informes realizados por el CNI y por agentes del Ministerio del Interior en el que aparecen los datos sobre las vidas, actividades personales y profesionales así como las propiedades de los dirigentes de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA).
Las investigaciones y escuchas telefónicas llevadas a cabo por los agentes se han centrado en tres dirigentes: su presidente Camilo Cela; el secretario de comunicación César Cabo y el portavoz Daniel Zamit.
Ene esta sentido, el diario El Mundo afirma que el informe se ha centrado en el estudio pormenorizado de sus comunicaciones telefónicas para conocer donde estaban el pasado 3 de diciembre, día en el que se produejeron las bajas masivas de controladores.
Otro aspecto del informe que ya tiene en su poder Rubalcaba se centra en conocer cuestiones personales de los investigados: propiedades e inversiones financieras. Al parecer, el objetivo de la búsqueda de propiedades está motivada en la decisión de la Fiscalía de Madrid sobre la posibilidad de solicitar el embargo de bienes de los dirigentes de USCA por posibles responsabilidades civiles.
Sin embargo, hay un personaje al que se le ha realizado un especial seguimiento. Se trata del abogado del sindicato Francisco Maroto, que también es asesor legal del Colegio Oficial de Pilotos de Aviación Comercial. En el informe dicen que ha tenido problemas con la Agencia de Protección de Datos.