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De la Vega y Bernardino León ¿víctimas de la semana negra de Zapatero?

La vicepresidenta primera del Gobierno lleva ya bastante tiempo "de capa caída" dentro del Ejecutivo y del PSOE, pero la serie de desastres vividos en la última semana podrían haber dañado definitivamente su imagen dentro de las propias filas. Algo similar habría ocurrido con Bernardino León.

Al menos esto es lo que se desprende de un extenso artículo de Miguel Gil que publica este martes La Gaceta en el que tomando diversas "fuentes socialistas" como punto de partida se describen detalladamente las horas bajas que atraviesa De la Vega y las distintas confrontaciones que ella misma ha creado dentro del Gobierno y de su partido (en el que, por cierto, no milita) y que la hacen candidata a ser la gran perdedora en la próxima remodelación ministerial.

La animadversión por De la Vega ha llegado a tal punto, -"ha tocado mucho a todos", se afirma-, que incluso se le atribuyen a la vicepresidenta los errores cometidos por el propio Zapatero.

La primera gran crítica es a la falta de coordinación del Gobierno, algo que sí sería responsabilidad de De la Vega y que en las últimas semanas ha sido visiblemente mejorable: "No basta con pedir que se presenten iniciativas, hay que coordinarlas, elaborar un discurso serio y transmitirlo con claridad a los ciudadanos y, desde hace tiempo, la sensación que transmitimos es que todo está manga por hombre, con un equipo poco compacto que no se encuentra a las alturas de las circunstancias", cuenta una fuente dentro del propio PSOE.

Pero no sólo eso, también se critican muy agriamente aspectos como su "pésimo carácter" o la falta de respeto por sus compañeros, que incluso ha supuesto bajas en su propio equipo, una de las últimas la de su jefe de Gabinete desde el 2005, Fernando Escribano, que dejó el puesto hace poco al parecer tras fuertes discrepancias con De la Vega.

Tampoco ayudan a la imagen de la vicepresidenta entre sus compañeros su habitual injerencia en temas en principio fuera de sus atribuciones de las que el artículo en La Gaceta cita dos ejemplos: su agenda internacional que habitualmente solapa la del ministro Moratinos, o el intento de formar parte de la negociación de los PGE, en lo que "Alonso tuvo que pararle los pies".

Y para colmo en el PSOE tampoco se ha olvidado el perfectamente descriptible éxito electoral de De la Vega en las últimas generales, cuando se presentó por Valencia y dejó palmariamente claro su nulo tirón electoral, pues la Comunidad Valencia fue una de las que dio al PP un mejor resultado.

Bernardino León, otro damnificado

Al igual que con De la Vega, otro de los damnificados por los últimos acontecimientos que están dejando en ridículo a Zapatero en el extranjero sería Bernardino León. Según informa El Confidencial, a quien desde Moncloa y Exteriores responsabilizan de la vergonzosa aparición del presidente en Davos.

El presidente quería estar en este foro sí o sí y para ello el actual secretario general de la Presidencia del Gobierno organizó todo. El problema está en que, según las fuentes de Moncloa, consiguió que estuviese en Davos pero "le sentaron en un panel junto al primer ministro griego y el presidente de Letonia y esa foto resultó letal para los intereses de la deuda española".

Igualmente, desde Moncloa también le achacan la polémica de las fotos de las hijas de Zapatero en la Casa Blanca junto a la familia Obama, algo que habría conmocionado a la familia hasta un punto difícil de imaginar, en particular a Sonsoles Espinosa ".

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