El fallo del TC sobre el Estatuto catalán ha sido el tema estrella de la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. María Teresa Fernández de la Vega ha tenido que responder a las amenazas de Artur Mas, que ha advertido al Gobierno de que podría dejarle caer. Para ello, ha intentado convencer de las bondades de las palabras de ayer del presidente del Gobierno: "No hay más que oírlas, es muy claro, se ha conseguido el objetivo que nos propusimos".
Apuntó que "sólo un artículo" se ha visto afectado en su totalidad e indicó que, tras estudiar la sentencia, se abordará su desarrollo "de la mejor manera posible para cumplir las mejores y las mayores expectativas de la aplicación del Estatuto". Aludía así a la promesa de Zapatero de que reforzará el texto.
Avanzó De la Vega, algo más clara que Zapatero, que su Ejecutivo tomará "decisiones normativas para reforzar su articulación" porque "hay espacio" en la sentencia del TC. "Seguramente habrá posibilidad de desarrollo normativo en el marco de la ley del Poder Judicial", confirmó la vicepresidenta como este jueves avanzaban algunos diarios.
Sobre CiU, manifestó que está "convencida" de que "no va a haber ningún tipo de problema en una interpretación diferente" y de que seguirán colaborando "como hasta ahora", "recabando los apoyos necesarios para sacar adelante las iniciativas que son buenas para este país".
Rajoy, "hipócrita"; Aznar, "antipatriota"
El grueso de las críticas, por supuesto, fueron para el PP, pese a que De la Vega comenzó su intervención con su habitual "no suelo comentar declaraciones de otros políticos". Afirmó que desde hace cuatro años, el PP "ha estado atizando la confrontación": "Si había que pedir firmas en la calle, las pedía, si había que denunciar la ruptura de la Constitución, se hacía; si había que apelar al principio del fin del Estado, se apelaba". E ironizó con que ahora sean "los mismos" los que piden "concordia y serenidad".
Llamó "hipócrita" a Rajoy por que mientras pida serenidad, Cospedal, Camps y Aznar hagan declaraciones. "Demuestra la baja autoridad del señor Rajoy en su partido", sentenció De la Vega, que se dedicó a continuación a descalificar al ex presidente del Gobierno: "Demuestra poco patriotismo, deslealtad institucional, y el barullo de los dirigentes del PP, que están contrariados por el varapalo que ha supuesto la sentencia". "No les debería extrañar que los ciudadanos de Cataluña le den la espalda", dijo en un claro mensaje electoral lanzado desde la mesa del Consejo de Ministros.