Ya es un clásico de las comparecencias de Mariano Rajoy. Micrófonos indiscretos, mensajes a su jefa de prensa... Este viernes el patinazo ha sido durante la reunión del Comité Ejecutivo regional del PP de Castilla-La Mancha, que ha presidido en compañía de la secretaria general de la formación y presidenta de los populares en la comunidad, María Dolores De Cospedal.
Rajoy finalizaba su intervención sin decir ni una sola palabra sobre los acercamientos y beneficios penitenciarios que se están concediendo a algunos de los terroristas más sanguinarios de la ETA. Las víctimas están indignadas, creen que se han traspasado "las líneas rojas" de lo admisible, pero el líder del PP ni siquiera se acordó del tema en toda su intervención. Las cámaras captaron como Cospedal, que estaba a su lado, tuvo que decirle en voz baja que se "había olvidado" de ETA. Pero ni por esas, Rajoy no se enteraba y respondía con "¿qué, qué?". Al final Cospedal optó por escribírselo en un papel y le insistía, susurrando, que se refería a las "excarcelaciones de etarras". Mientras, Rajoy intentaba salir del paso: "Puedes decirlo, es un acto del partido".
Después del aviso de Cospedal, Rajoy insistió en su apoyo al gobierno pero "para que no se negocie con ETA, para que no se presenten a las elecciones, para que se cumpla la ley y se derrote a ETA". Dijo que no es ilegal acercar a los presos de ETA al país vasco, "pero también es legal no hacerlo. Quiero que el gobierno lo explique. Las victimas y los españoles tenemos derecho a saber qué está haciendo el gobierno".
Antes Rajoy había repetido su misma intervención de los últimos meses, centrada exclusivamente en la crisis económica "ha sido la etapa del desempleo, de los recortes sociales y de la falta de seriedad, rigor y sentido común" y en proclamarse a sí mismo como nuevo presidente a casi dos años de las elecciones. Del Estatuto y la deriva independentista en Cataluña sigue sin decir palabra –se limitó a decir que Zapatero "ha hecho el ridículo" y "ha engañado a todo el mundo"– y del escándalo de ETA, si Cospedal no se lo recuerda, tampoco. Eso sí, de los toros no se olvidó el pasado miércoles.