El senador Luis Bárcenas ha tenido siete meses, desde que el pasado 28 de julio anunciara que dejaba de ser “temporalmente” tesorero del PP ante su inminente imputación en el caso Gürtel y con un partido que gritaba de puertas para dentro su cese, para informar a la Comisión de Incompatibilidades del Senado que ya no es el "coordinador económico" de la formación que lidera Mariano Rajoy.
Sin embargo, el dirigente popular, que disfruta de despacho y secretaria personal en Génova y a quien el aparato del partido le paga un prestigioso abogado, jamás dijo a la Cámara Alta que ya no es el responsable de las finanzas del PP, y este lunes la Cámara ha publicado en su página web las declaraciones de actividades de los 263 senadores que la integran, en cumplimiento del acuerdo alcanzado por las Mesas de las Cortes el pasado 21 de diciembre.
Un hecho -que muchos ya tildan de “provocación” en el seno del partido- que se ha colado en forma de chascarrillo en la reunión del Comité de Dirección del PP, que se ha celebrado en la sede nacional de la formación con Rajoy al frente. Ya en la rueda de prensa posterior, una molesta María Dolores de Cospedal intentaba aclarar esta situación: “desde que se dijo en su día, no es tesorero del PP”.
De hecho, la secretaria general de los populares insistió en hasta cuatro ocasiones que “el señor Bárcenas” ya no lleva las finanzas del PP, y apostilló que “es algo que está muy claro” pese a que el senador lo haya obviado en su declaración ante el Senado.
“Como no es tesorero del PP, la imagen del PP es la que es, pero no es el tesorero del PP, no lo es”, continuó, para después defender que han sido “el partido que más personas ha relegado de sus cargos o suspendido por asuntos por los que hasta ahora sólo hay imputaciones”. Se olvida, eso sí, de que teóricamente Bárcenas abandonó voluntariamente sus responsabilidades.
El enfrentamiento de Cospedal con Bárcenas
No es la primera vez que Cospedal tiene que dar la cara por Bárcenas pese a su conocida enemistad. A primeros del mes pasado, El País publicaba que Génova está pagando los servicios del abogado que defiende al senador en la trama corrupta -uno de los penalistas más prestigiosos de Madrid y que cobra más de 300 euros la hora- a diferencia de lo que ocurre con el resto de implicados, incluidos Francisco Camps y Ricardo Costa.
La número dos del PP salía paso diciendo que el PP asumía “el gasto y el coste” de la defensa de Bárcenas porque “ha sido durante treinta años trabajador” del partido. Y es que, pese a la oposición de Cospedal, cabe recordar que el senador también tiene aliados en Génova -Javier Arenas, entre otros- y fue decisión de Rajoy se le mantuviera el despacho y la secretaria.